Raúl Flores Martínez.
En México hay un refrán popular que versa “Con Dinero baila el Perro”, este adagio popular quedó de manifiesto con el perdón que se le concedió a Alonso Ancira Elizondo, dueño de Altos Hornos de México, S. A. quien pagará 216 millones de dólares por concepto de reparación del daño por la compraventa irregular de la planta de Agro Nitrogenados.
Una suma de dinero que fue garantizada con 50 propiedades de las que es dueño, el pago será casi, casi en abonos chiquitos que deberá pagar los días 30 de noviembre de 2021, 2022 y 2023, al término de los pagos el juez podrá declarar extinta la acción penal por el delito de lavado de dinero.
Así se cierra un capítulo del tema Odebrech en México, ese tema que una y otra vez se decía que deberían tener castigo todos los involucrados en este caso; sin embargo, la realidad es otra.
El refrán de “Con dinero baila el perro” quedo como anillo al dedo, en este sexenio que se busca sacar dinero de hasta por debajo de las piedras con la finalidad de seguir ganando adeptos al dar los apoyos sociales que no le cuestan al Presidente y su gabinete, sino a cada uno de los mexicanos que pagamos impuestos.
Si esta es la estrategia legal que se puede utilizar por todos los abogados de delincuentes de cuello blanco y narcotráfico en este país, para que no sean alcanzados por las autoridades a pesar de haber cometido un delito.
Le aseguro que los 216 millones de dólares por concepto de reparación del daño por la compraventa irregular de la planta de Agro Nitrogenados, no es ni una cuarta parte de las ganancias que obtuvo el empresario con esta venta irregular.
Con esta designación del juez de la causa, seguida por la instrucción que en su momento dio el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador de que devolviera el dinero, muchos de los delincuentes podrán negociar su captura y el perdón de las leyes a cambio de pagar lo que se llevaron, sin importar que les haya dejado buenos dividendos.
Con esta decisión del juez, uno se puede preguntar ¿Qué pasa con Rosario Robles? Que no puede llevar su proceso en libertad, como lo hizo Ancira, quizá porque la ex titular de Sedesol, no tiene los millones del dueño de Altos Hornos de México, S.A. para negociar su libertad.
No se sorprenda que Emilio Lozoya y todos los involucrados en el caso Odebrecht, alcancen su libertad en pocos meses y este asunto quede cerrado para las autoridades mexicanas, que enseñaron el cobre, “con dinero baila el perro”.