La región metropolitana de París, en Francia, podría estar próxima a otro régimen de confinamiento colectivo debido al aumento de casos de la nueva variante del coronavirus y a la disminución de reservas de la vacuna que hace frente al Covid-19, mientras en el fin de semana algunos enfermos fueron trasladados a zonas de menor densidad poblacional.
Las autoridades locales no temen en aplicar nuevamente limitaciones ante la propagación de la pandemia, especialmente tras el hallazgo de los casos de variantes detectadas primeramente en Reino Unido y Sudáfrica.
“Si tenemos que ordenar otro confinamiento colectivo, lo haremos. La situación es compleja y tensa y en la región metropolitana de París está empeorando”, advirtió hoy el director de la agencia nacional de salud, Jerome Salomon.
En declaraciones a la emisora BFM, Salomon reconoció que el toque de queda impuesto a nivel nacional “no ha sido suficiente” para detener el aumento de los casos.
El gobierno francés usó los toques de queda, además de los cierres de restaurantes y otros negocios para tratar de evitar una prohibición total a largo plazo, así como las repercusiones económicas que ello tendría. Pero los focos de infección locales están arrojando dudas sobre la estrategia.
Salomon manifestó que en Francia hay más gente en unidades de cuidados intensivos por covid-19 o por otras enfermedades que la cantidad de camas disponibles para las UCI antes de la pandemia.
Francia ha sufrido 90 mil 315 muertes por el virus, una de las cifras mortales más altas del mundo.
AP