Nueva York.- El titular de la ONU condena la toma del control del país por parte de los militares y pide que todos los líderes actúen en el mayor interés de la reforma democrática de Myanmar, entablando un diálogo significativo, absteniéndose de la violencia y respetando plenamente los derechos humanos y las libertades fundamentales.
El Secretario General de las Naciones Unidas ha condenado enérgicamente la detención de los principales líderes políticos y funcionarios gubernamentales de Myanmar, incluida la Consejera de Estado Aung San Suu Kyi y el presidente Win Myint, por parte del Ejército del país.
En un comunicado emitido por su portavoz, el Secretario General, António Guterres, también expresó su “grave preocupación” por la declaración del traspaso de todos los poderes legislativos, ejecutivos y judiciales a los militares.
“Estos acontecimientos representan un duro golpe para las reformas democráticas en Myanmar”, señaló el portavoz.
António Guterres insta a los líderes militares a respetar la voluntad del pueblo de Myanmar y adherirse a las normas democráticas.
Por su parte, Volkan Bozkir, presidente de la Asamblea General de la ONU, también expresó su preocupación por la situación en Myanmar.
“Los intentos de socavar la democracia y el estado de derecho son inaceptables”, dijo en un tuit, pidiendo la “liberación inmediata” de los líderes políticos detenidos.
Con información de la ONU