Raúl Flores Martínez.
Con gran algarabía y al viejo estilo priísta, se arrancó desde hace varios días, la llamada jornada de vacunación contra el Covid a trabajadores de la salud en Querétaro, Toluca, Coahuila, Nuevo León y CDMX.
De acuerdo a los que saben, no es casualidad, de que estos estados hayan sido los primeros en obtener de manera gratuita, las pocas vacunas para el personal del sector salud.
La bola que tiró el Presidente Andrés Manuel López Obrador en las entidades gobernadas por el PAN y PRI, tiene la finalidad de arrancarle los votantes a este instituto político, una bola para ponchar al bateador, si se maneja el lenguaje del béisbol.
¿Dónde están las vacunas apá? Sería la pregunta, vacunas que son insuficientes para un país que tiene más de 128 millones de mexicanos, que hasta el momento no se ha inyectado el 0.1 por ciento.
De acuerdo a los expertos, los mexicanos quedarán inmunizados, hasta finales del 2022, lo que va a generar que las cifras de muertos, se tripliquen y seamos el país con la cifra más alta de decesos por Covid en el mundo.
A quién se le ocurrió la idea de utilizar la vacuna contra la pandemia, como bandera electoral, una bandera que será la tumba de las huestes morenitas que serán enterradas en las próximas elecciones del 2021.
No hay vacunas que alcancen y tampoco el dinero, que no se ha dado para los siguientes cargamentos, es una mentira que se tienen los recursos para el pago del biológico, una gran mentira que solo la creen, quienes no están informados que nuevamente, es atole con el dedo.
Las vacunas llegan a cuenta gotas y así, estarán llegando hasta mediados del 2021 para seguir con la estrategia de la bondad del señor Presidente y el partido del cambio, un cambio que tiene mucho del viejo PRI.
Solo debemos recordar que el PRI en sus años mozos, hacia circo, maroma y teatro para lucir sus “logros” entre baños de pueblo para ganarse al pueblo. Hoy te a otro partido con las mismas raíces y ADN del viejo PRI también es el mismo pueblo, solo que ahora es bueno, en espera de las dádivas de papá gobierno.