Raúl Flores Martínez.
La pandemia del Covid ha traído muerte y encierro en el país, también ha disparado los niveles de violencia de todo tipo, incluyendo el acoso sexual a través de las redes sociales, fuentes laborales y calle.
Un ejemplo de impunidad, consentimiento y valemadrismo sobre el tema del acoso sexual, se viven en el municipio de Pedro Escobedo, Querétaro, donde por lo menos cuatro servidoras públicas de esa administración panista, son acosadas sexualmente por sus directores de área.
El primer caso fue el del secretario de gobierno municipal, Omar “S”, quien fue destituido por el alcalde, Amarildo Bárcenas Reséndiz, quien en su momento aseguró:
“En el Municipio de Pedro Escobedo, no toleraremos ningún tipo de violencia que busque menoscabar, limitar o anular los derechos de las mujeres. Por ello desde el inicio de mi Administración se han implementado y aplicado todas aquellas normativas que garantizan el pleno ejercicio de sus derechos”.
Ahora el alcalde de Pedro Escobedo qué hará con el secretario de gobierno interino, Carlos Hernández Martínez, quien tiene una denuncia ante la Fiscalía General del Estado por acoso sexual de acuerdo con la Carpeta CI/QRO/25963/2020, quien tiene una medida de restricción para evitar que se acerque a la víctima.
Qué hará el alcalde quien junto con todos sus funcionarios, recibieron un curso para evitar el acoso sexual que dio el Instituto de la Mujer Estatal, días después de hacerse público el acoso del ex secretario de gobierno, sobre todo que hará con su funcionario que presume estar protegido por el mismo alcalde.
De acuerdo con la Información Filtrada, la víctima en distintas ocasiones dio parte en primer lugar al secretario particular del alcalde e incluso al propio Amarildo Bárcenas Reséndiz, quien sigue consintiendo a los acosadores sexuales en su administración.
A decir de los asistentes del curso contra el acoso, el presidente municipal, advirtió que le faltaba más de un año para terminar y no quería problemas.
Qué pensará el líder del PAN, Marko Cortés, que en Pedro Escobedo se protegen a los acosadores sexuales y misóginos, sobre todo qué pensarán los habitantes de este municipio, volverán a votar por personas así.
Esta es la segunda de cuatro denuncias por acoso dentro de la administración panista de Querétaro, dos denuncias que dejarán mal parado al alcalde, si no toma las medidas necesarias, antes de que le explote la bomba en las manos.
