Raúl Flores Martínez.
El hartazgo de los mexicanos tuvo un límite, al grito de “Para que sientas, lo que sentimos”, los usuarios del transporte público del Estado de México, han sentenciado a los delincuentes que les roben sus pertenencias.
Un grito de guerra que provocará más muertes en el transporte público que tiene uno de los delitos con más alta cifra negra en todo el país; esto se debe a lo que por años se ha sufrido, una nula profesionalización en los ministerios públicos que, de una manera elegante, acusan a los propios usuarios de ser partícipes en los atracos para evitar que denuncien.
Esto pasa en todos los ministerios públicos, esos licenciados, abogados que estudiaron una licenciatura en la cual, supuestamente se comprometieron para ejercer con ética y profesionalismo, que al final, la burocracia los absorbió al igual que la corrupción.
Casos específicos podemos dar en racimo en el Estado de México, paraíso de los delincuentes coludidos con funcionarios de distintos niveles de la Fiscalía General de Justicia de la entidad, coludidos con elementos de las corporaciones policíacas que, en lugar de apoyar a la ciudadanía, solo las hacen víctimas.
Cuántos gritos de guerra, cuántas patadas, puñetazos tendrán que recibir los delincuentes en el transporte público para que las autoridades, se pongan las pilas y comienzan la cacería de los delincuentes, acaso es necesario que nuevamente resurjan los vengadores anónimos, esos que matan a los delincuentes y en silencio bajo la complicidad de los asaltado, pueda burlar la ley.
No hay cifras exactas de cuántas personas son asaltadas diariamente en el transporte en el Estado de México, nunca las habrá, porque es más fácil comprarse otro celular, reloj u objeto robado que ir a perder el tiempo con la burocracia analfabeta de los ministerios públicos y la prepotencia e ignorancia de los ministeriales
Qué, por cierto, están haciendo de las suyas en el municipio de Zumpango, bajo pretexto de hacer operativos contra el robo de vehículos, dónde casualmente todos los vehículos que son detenidos, tienen reporte de robo para sacarles una cuota que oscila de los 3 a 5 mil pesos. En caso de no dar ese dinero, son acusados de diversos delitos, como castigo por no “cooperar”.
Cuántos gritos de guerra, cuántos linchamientos de los héroes anónimos, y cuántos memes para que las autoridades, se pongan a trabajar a investigar o tendrá que ser la Marina-Armada de México, la que les tenga que hacer su chamba, como en la CDMX, Eso será revelado más adelante.