El Caribe.- El polvo africano sopla a través del Atlántico cada año, pero este año el evento es particularmente intenso y extenso y amenaza gravemente el medio ambiente, la salud de miles de personas, así como el transporte y las economías, han explicado expertos de las Naciones Unidas. Tres islas del Caribe han tenido que poner al nivel máximo sus alertas de contaminación de aire, que alcanza niveles que no se habían visto en 20 años y puede causar enfermedades respiratorias y cardiovasculares.
La nube de polvo que llegó del norte de África al Caribe Oriental el 17 de junio y ha oscurecido y contaminado el aire de varios países y territorios en los últimos días ha alcanzado proporciones históricas, confirmó la Organización Meteorológica Mundial este viernes.
El fenómeno se ha expandido al Gran Caribe: desde el sureste de la región, cerca de la costa norte de América del Sur y hasta el norte y el oeste de la península de Yucatán en México.
“Hemos visto las fotos de la llegada de la oscuridad en el día, y el agua contaminándose, es algo muy dramático. La tormenta de polvo oscurece los cielos, contamina el agua de lluvia y reduce enormemente la visibilidad. Pero sobre todo también plantea un peligro significativo para la salud”, explicó la portavoz de la OMM, Claire Nullis, durante una conferencia de prensa en Ginebra.
Las tormentas de arena y polvo son peligros graves que pueden afectar el clima, el medio ambiente, la salud, las economías, el transporte y la agricultura en muchas partes del mundo. El polvo africano sopla a través del Atlántico cada año. Pero este año el evento es particularmente intenso y extenso, han explicado expertos de la Organización.
“La tormenta de polvo en curso, que ha afectado la vida diaria en el Caribe, muestra la importancia de los servicios de pronóstico y advertencia”, aseguró Oksana Tarasova, jefe de la división de Investigación del Medio Ambiente Atmosférico de la OMM.
El Arsenal / Con información de la ONU