Raúl Flores Martínez.
Resulta que según o de acuerdo con las autoridades de la Ciudad de México, el denominado Cártel de Tláhuac ya está casi exterminado, que solo falta un solo integrante para acabar con esta organización.
Una declaración demasiado temeraria del titular de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, Omar García Harfuch, explicó que sólo queda pendiente la detención de Carlos Alejandro Mendoza Sandoval, yerno de Felipe de Jesús Pérez, alias “El Ojos”, líder de esta organización que fue abatido por la Armada de México.
Explico por qué una declaración temeraria: no deben olvidar que una organización como la de Tláhuac, no la compone nada más una familia, la estructura va más allá del primer círculo.
Este monstruo de mil cabezas, tiene muchos más líderes que la familia cercana de “El Ojos”.
Faltan los lugartenientes, que incluyen elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, municipal de Valle de Chalco y Chalco, quienes son los encargados de la distribución de la droga en la zona oriente del Estado de México.
¿Acaso no sabrá García Harfuch que una organización criminal no se compone nada más de integrantes de una sola familia?; no solo depende de tíos, primos, hijos, yernos o esposas/esposos.
La estructura criminal que construirá “El Ojos” va más allá de su familia, va más allá de la alcaldía de Tláhuac, tiene mucha base social compuesta por mototaxistas, policías y funcionarios.
Ahora solo queda esperar, esperar un reacomodo de la organización que trasciende está haciendo una alianza con el CJNG con la finalidad de darle batalla a la Unión Tepito y apoderarse de la CDMX.
En pocas palabras, los dolores de cabeza para el gobierno de la Ciudad de México, serán más fuertes en los próximos meses.