Raúl Flores Martínez.
Ayer, en este espacio, di a conocer los grupos delictivos que tienen aterrorizados a los habitantes del estado de Guerrero, escisiones y células que se han aliado a los grandes carteles de la droga.
Para nadie es un secreto que alguna autoridades e incluso alcaldes y ex alcaldes, están metidos con el crimen organizado para protegerlos y obtener ganancias.
De acuerdo con la Información Filtrada que se lee en diversos documentos oficiales del gabinete de Seguridad del Gobierno Federal, denominado Carteles de la droga que operan en la República Mexicana, correspondiente al año de 2019 que fue entregado al Presidente Andrés Manuel López Obrador, se tiene el nombre de algunos alcaldes en funciones, ex alcaldes y ex legisladores están ligados o forman parte de la estructura criminal del Cártel del Pacífico, Familia Michoacana y Jalisco Nueva Generación en municipios de Tierra Caliente y zona norte de la entidad.
Dentro del nombre de alcaldes en funciones, resalta el del municipio de Cuajinicuilapa, Óscar Alejandro Marín Mendoza, ligado a “El Chino Marín”, líder regional denominados “Los Marín”, aliados del Cártel Jalisco Nueva Generación. Tanto Marín Mendoza como a “El Chino Marín”, están ligados como familiares cercanos y figuran dentro de los 18 grupos delictivos en el estado de Guerrero.
En la zona norte de la entidad, las áreas de inteligencia del Gobierno Federal, han ubicado los movimientos del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) que tiene la alianza con “Los Granado” que encabeza Samuel Granados Soberanis, alias “El Bastón” y/o “El Moyo” y/o “El Viejo del Bastón”, junto con Salvador Granados Vargas (a) “Chava” y/o “Chava Granados”; Abelardo Soberanis Hernández (a) “El Ave”; Rubén Granados “El Nene” y el ex presidente municipal de Tecpan de Galeana (2015-2018) Leopoldo Soberanis Hernández (a) “Sr Don Polo” y/o “Don Polo”.
En el caso de la Familia Michoacana, se lleva una investigación al líder regional de la organización criminal, Jesús Méndez Rosales (a) “El Cuchi” y/o “León Rapado” y/o “El Cebollón” (hijo de José de Jesús Méndez Vargas, alias “El Chango”) que reclutó durante su gestión a la ex alcaldesa del municipio de General Canuto A. Neri, Acapetlahuaya, Rosa Elvira Salgado (2015-2018) para la zona norte del estado.
También el ex presidente del Congreso del Estado de Guerrero, Bernardo Ortega Jiménez, tiene ligas con la organización delictiva denominada “Los Ardillos”, aliados del cártel del Pacífico. Otro de los casos, es el ex presidente municipal de Cuetzala de Progreso, Ramiro Gutiérrez Baiza, quien forma parte de “Los Guerreros Unidos”.
Las investigaciones realizadas en el estado de Guerrero, también exhibe los vínculos de familiares cercanos a los alcaldes, como es el caso de Conrado Mendoza Alameda, alias “El Ope”, líder de la Familia Michoacana en el municipio de San Miguel Totolapan. El Comandante de Ope, como también se le conoce, es hijo de Juan Mendoza Acosta, actual presidente municipal de Totoloapan, quien en reiteradas ocasiones ha sido acusado por la regidora del PRI del Ayuntamiento, María del Carmen Barrera Navarro, de dirigir a la Policía Comunitaria y de tener nexos con el grupo delictivo “La Familia Michoacana”.
Los nombres, fotografías y apodos de los políticos antes mencionados, están dentro del análisis que realizaron las áreas de inteligencia del gobierno Federal que denominaron, Carteles de la droga que operan en la República Mexicana, correspondiente al año de 2019.
Este informe ya fue dado a conocer a las autoridades locales y Federales en las reuniones mañaneras de seguridad; sin embargo, hasta el momento no han actuado en contra de los involucrados.