México.- Debido a que se reactivaron las investigaciones en su contra, la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) congeló las cuentas de ocho integrantes de la familia Hughes Alcocer y Hughes Acosta. En su momento, la PGR los investigó por crear empresas para desviar recursos del gobierno de Guerrero, durante el sexenio de Ángel Aguirre Rivero.
El exgobernador del Partido Revolucionario Institucional y la familia Hughes usaron un esquema de tres empresas, dedicadas al ramo de la construcción y comercios, con lo que se habría desviado más de 287 millones de pesos de distintas áreas gubernamentales durante el periodo 2012 a 2014.
La entonces Procuraduría General de la República (PGR) indagó a Constructora Trabesa S.A. de C.V., desde donde desviaron 7 millones de pesos; a Comercializadora 2003 S.A. de C.V, por 20 millones; y a Comercializadora Topacio S.A. de C.V. por los 260 millones restantes.
Derivado de dichas querellas, fueron detenidos su subsecretario de Finanzas y Administración estatal, Víctor Ignacio Hughes Alcocer; su hermano, Henry Paul Hughes Alcocer; y su sobrino, Víctor Felipe Hughes Acosta en febrero de 2015, como principales acusados.
También fueron aprehendidos otros cinco de los sobrinos del exsubsecretario y amigo personal de Ángel Aguirre: Paulo Ignacio, Mauricio Francisco, Carlos Alejandro, Jorge Eduardo y Víctor Felipe Hughes Acosta.
La PGR los señaló de operar una red de desvíos de recursos contra dependencias federales a través de programas y convenios con la Comisión Federal de Electricidad (CFE), Banobras y la Tesorería de la Federación; también defraudaron dependencias estatales como la Comisión Estatal del Agua, el Consejo Estatal de Seguridad Pública y la Comisión de Infraestructura Carretera y Aeroportuaria del Estado de Guerrero.
Como cabecilla de la red fue imputado Carlos Mateo Aguirre Rivero, hermano del exgobernador, quienes tenían una estrecha relación con la familia Hughes, tras la amistad que consolidaron cuando Aguirre Rivero fue senador de la República en 2006.
A pesar de que fueron aprehendidos por la Policía Federal, en 2016 los Hughes fueron liberados tras pagar millonarias fianzas por reparación de daño y para garantizar pena pecuniaria; sin embargo, a finales de enero les fueron suspendidas nuevamente sus cuentas bancarias, a petición de la CNBV por nuevas investigaciones en su contra.
El Heraldo de México