México.- Hay poca certeza de cuántas y cuáles empresas integran a los Cuerpos de Seguridad Auxiliar y Urbana del Estado de México (Cusaem) y ocurre lo mismo con el número de contratos que recibió durante la administración de Enrique Peña Nieto.
De acuerdo con la información disponible, este cuerpo de seguridad privada se hizo de 105 contratos por un total de 3 mil 389 millones 039 mil 209 pesos. Ese es el acercamiento que la información de la Plataforma Nacional de Transparencia permite hacer a más de un año del cambio del Gobierno federal.
Sin embargo, no es posible afirmar que efectivamente todo el dinero que ganaron. Por ejemplo, los contratos que celebró con la entonces Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) aparecen como “no disponible para su consulta”, y la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) tiene parte de la información reservada.
Además, la información es pública por solicitudes de información dirigidas a las principales secretarías del Gobierno federal y la mayoría de 2012 a 2017, por lo que falta conocer si se le contrató en 2018 y 2019, últimos años del sexenio del priista Peña Nieto.
El Partido Revolucionario Institucional (PRI) regresó a Los Pinos en 2012 y trajo consigo a su cuerpo de seguridad. Tanto el Presidente como la empresa salieron del Estado de México.
Conforme la violencia aumentó en el país, el mercado de la seguridad privada fue uno de los más fructíferos. Del año 2006 a la fecha, la política de combate al narcotráfico iniciada por Felipe Calderón Hinojosa tiene como saldo al menos 268 mil 784 homicidios dolosos y más de 61 mil desaparecidos.
El caso de Cusaem es particular. La administración de Andrés Manuel López Obrador la tiene en la mira, además la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) alertó sobre ella y hasta en el gremio su actuar despierta dudas.
“¿No les parece eso una aberración? Se contaba con 10 mil efectivos para cuidar a la gente, 10 mil efectivos de la Policía Federal, y se contrataba para cuidar las oficinas del gobierno y a los funcionarios a 50 mil policías privados. Estamos haciendo la depuración de todo esto. Se crearon empresas privadas de seguridad vinculadas con políticos. Ahí se los dejo de tarea, pero estamos en eso”, dijo el Presidente el pasado 23 de abril en su conferencia matutina.
Luego, el 4 de julio pasado, dijo que en la administración de Peña Nieto se fomentó la creación de estas corporaciones, y se llegó al extremo que el Gobierno federal contrataba más policías privados que los policías oficiales para garantizar la seguridad del pueblo, la de los ciudadanos.
Roberto Rivera Mier, director de Asuntos Interinstitucionales de la Asociación Mexicana de Empresas de Seguridad Privada (AMESP), comentó en entrevista con SinEmbargo que las policías auxiliares o complementarias, afectaban la competencia en el sector.
Rivera Mier dijo que con la empresa Cusaem, al ser una figura estatal y a la vez de seguridad privada, se generaba una competencia desleal “porque utilizan las armas de seguridad pública para la seguridad privada […] hay un manejo bastante oscuro y en todos los estados de este tipo […] esta policía del Estado de México creció el doble de lo que era porque tenían hasta a la Secretaría de Gobernación y a la mayoría de las instituciones”.
También añadió que existe un manejo dudoso de recursos, porque cuando convenía eran ente público o si no, privado. “Ese modelo no existe en otro lugar del mundo más que en México, que una empresa de seguridad pública dé servicios de seguridad privada”, dijo.
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos emitió una recomendación al respecto de cómo se maneja Cusaem. Dijo que ha trabajado por años en el “limbo” legal, pues cuando les conviene se ostentan como privados o como cuerpos auxiliares de seguridad del Estado.
Sin Embargo / Daniela Barragán