Rubén Cortés.
Es pueril la discusión sobre si el crecimiento económico es importante, porque acaba en el tiempo que trascurre leer que, por el descenso de la economía a 0.1:
–Menos mexicanos tienen trabajo. Este gobierno empezó con 20 millones 457 mil empleos formales y hoy hay 36 mil menos.
–El gobierno metió mano al fondo de ahorro que no había tocado ningún otro. Recibió 260 mil millones de pesos, ya sacó 125 mil millones y este año sacará el resto. Se habrá chutado en dos años el ahorro de 20.
–Los pensionados del IMSS ya no van a poder recibir una jubilación de 25 salarios mínimos, sino de solo 10. Eso ayudará a un gobierno que gasta mucho y mal, pues creció en 0.9 por ciento su gasto corriente, y consumió 60 mil millones de pesos en sus programas sociales “Sembrando vida” (que apenas llegó a 14 por ciento de su meta) y “Jóvenes Construyendo el Futuro” (que empleó sólo a 20 mil de casi un millón).
Pero, además de todo lo anterior, y con la economía en números rojos, este gobierno:
–Sigue pagando fortunas por cancelar el NAIM, como 75 mil 223 millones de pesos por liquidación de contratos y recompra de bonos, y le faltan por pagar más de 80 mil millones de pesos a tenedores extranjeros de bonos.
–Y entre que rifa, vende o desguaza el avión presidencial, ha pagado por tenerlo estacionado 617 millones de pesos. Y, aunque lo rifen, seguirá debiendo 142 millones de dólares por su compra.
Pero si aún las cifras anteriores no zanjan la polémica sobre si el crecimiento económico es importante, leamos la opinión de estos dos personajes:
“No hay vuelta de hoja: un crecimiento económico robusto y sostenido es una condición necesaria, aunque no suficiente, para que todos los mexicanos podamos vivir con dignidad”. Carlos Urzúa, ex secretario de Hacienda en el actual gobierno.
“Eso que estamos padeciendo ahora en México, de crecer al dos por ciento a lo largo de 30 años, es producido, además de la corrupción, es por la falta de crecimiento económico. La política económica ha sido un fracaso completo. Estoy convencido de que si no hay crecimiento económico no hay empleo y si no hay empleo no hay bienestar y si no hay bienestar no hay paz, si no hay paz no hay tranquilidad”. El actual presidente, durante su campaña.
Queda claro que un gobierno jamás podrá impulsar ninguna política pública sin suficiente dinero, y éste solo le llega a través del crecimiento económico que, bien repartido, produce empleo, bienestar, paz y tranquilidad, como asegura el hoy mandatario.
Y el dinero, para saber usarlo…
Primero hay que saber producirlo.