Raúl Flores Martínez.
Quizá algunas escenas de las que se han vivido en los últimos meses, sean parte de la filmación de una nueva serie de narcos para televisión.
Porque, de otra manera, no puedo explicarme por qué el Gobierno Federal protege a un solo cártel de las drogas considerado de los grandes en México.
Hablo del Cártel del Pacífico que casualmente en octubre del año pasado, en una operación fallida, torpe, el único éxito que tuvo fue que se exhibió la incapacidad de reacción de un sector del Ejército Mexicano.
Sí, esa operación donde se liberó a Ovidio Guzmán, hijo del que fue considerado el enemigo público número uno del mundo por Estados Unidos.
Sin antes dar las facilidades a la madre del capo con las visas para que pudiera ir a verlo antes de ser juzgado.
Si a esto le agregamos la suntuosa boda que se celebró en Culiacán, Sinaloa, entre Alejandrina Guzmán Salazar, hija del “Chapo” Guzmán, con Edgar Cázares, señalado como sobrino de Blanca Margarita Cázares Salazar, líder de la red de lavado de dinero del Cártel del Pacífico.
Más la fuga en el penal del sur en la CDMX, del operador financiero de los hijos del “Chapo”, se podrá entender que hay una organización criminal favorecida.
La misma que fue favorecida durante el sexenio de Felipe Calderón; entonces, qué ha cambiado, dónde está la honestidad valiente que se pregona; ya se dieron cuenta que aún hay corrupción y esa jamás desaparecerá.
Quizá muy pocos se han dado cuenta de esto, porque muchos están entusiasmados y listos para comprar el cachito del billete, el billete ganador del avión presidencial.
“A qué le tiras cuándo sueñas mexicano”, frase perfecta que fue acuñada por el legendario Chava Flores que en estos tiempos queda a la medida.
Desgraciadamente, mientras muchos sueñan con un avión que jamás en su vida podrán tener, me refiero al pueblo bueno, esos que reciben sus becas bimestralmente; porque los empresarios créalo, no les interesa en lo más mínimo.
Mientras muchos sueñan, el crimen organizado se fortalece, ya sea el consentido o no. Incluso hace pensar lo que se difundió en redes sociales en octubre pasado, supuestamente por parte de Ovidio Guzmán, “los pagos para la campaña del actual Presidente, se revelarían”, algo que nunca sabremos, si es verdad o mentira.