México.- Desde el pasado fin de semana las autoridades han registrado decenas de intentos de saqueo y robos a tiendas y supermercados en el país (mas de 50 de ellos consumados solo en el Valle de México) perpetrados —en algunos casos —por sujetos aparentemente organizados, bajo el supuesto contexto de un desabasto o escasez de productos por la emergencia sanitaria del coronavirus COVID-19.
En la realidad se han tratado de robos (algunos convocados en redes sociales y otros organizados solo entre los involucrados) cuyo común denominador es el factor de “oportunidad” que ha generado el contexto actual, y donde el objetivo no son los supuestos víveres sino obtener un beneficio económico ilegal con diversos bienes y productos.
Todo comenzó el pasado fin de semana con el robo perpetrado a un supermercado Chedraui en el municipio de Tecamac, Estado de México, pero se ha extendido a establecimientos de cadenas como Wal-Mart, Bodega Aurrera, Coppel o Elektra, y a múltiples tiendas de conveniencia y negocios independientes.
A partir de la información proporcionada por las secretarías de Seguridad del Estado de México y Ciudad de México, se detallan los puntos clave detrás de estos hechos criminales que hasta han dejado más de 100 personas detenidas, pero donde las investigaciones continúan para dar con posibles autores intelectuales y otros cómplices.
Las autoridades han identificado hasta el momento tres perfiles de presuntos responsables detrás de estos hechos. En algunos casos, como los robos o saqueos a tiendas departamentales, se presume la participación de los tres tipos de involucrados, mientras que en otros casos solo de uno o dos.
Un primer perfil es el de los administradores de redes sociales. Se trata de los responsables de las páginas de Facebook a través de las cuales se hicieron convocatorias a realizar saqueos en establecimientos comerciales en el Estado de México y otras entidades.
Hasta este 26 de marzo, se tenían identificados a 63 administradores detrás de 29 grupos de Facebook de los cuales al menos 50 están asociados con convocatorias previas en situaciones de aparente crisis, como la del “gasolinazo” de inicios de 2017 o los saqueos del proceso electoral de 2018.
Las unidades de policía cibernética han aislado los alias o seudónimos de usuarios, pero se desconoce la identidad real de la persona o personas detrás de ellos. Se colabora con Facebook para el seguimiento y bloqueo de dichos perfiles. Se presume que su motivación pudiera ser el obtener un beneficio económico o generar pérdidas materiales, pero no se ha detectado una motivación política o ideológica detrás de ellos.
Un segundo grupo es el de los ladrones de negocios. Se trata de personas que actúan solas o en banda para perpetrar robos a negocios y que se presume han participado en casos anteriores. Algunos tienen antecedentes penales. En su mayoría son hombres y tienen entre 25 y 35 años de edad.
A este grupo pertenece el 70% de las personas que han sido detenidas hasta ahora, algunos de ellos armados. Han perpetrado robos por su cuenta, pero se presume que también se han incrustado en algunas de las convocatorias públicas o ellos mismos han creado las suyas.
El tercer grupo es el de personas improvisados. Se trata en su mayoría de jóvenes y menores de edad que animados por las convocatorias en redes deciden participar en algunos de los saqueos masivos a tiendas o han participado en robos a locales mas pequeños, como pizzerías o tiendas de conveniencia. De este perfil son el resto de los detenidos.
Animal Político