EEUU.- La caída del precio debilitará el crecimiento de algunas transferencias federales a los gobiernos locales y regionales mexicanos que están parcialmente financiadas con ingresos del petróleo, consideró la firma financiera Internacional Moody’s.
Sin embargo, el sector se beneficiará principalmente del fondo de contingencia y probablemente de los contratos de cobertura en 2020, suavizando el efecto financiero hasta el final del año.
Las participaciones federales no etiquetadas representan algo más de un tercio de los ingresos totales de los estados mexicanos y si bien estas transferencias se financian principalmente con la recaudación de impuestos federales, también incluyen los ingresos petroleros que fluyen hacia el Fondo Mexicano del Petróleo para la Estabilización y el Desarrollo.
En su reporte la calificadora de valores afirmó que sin una recuperación global del precio del petróleo y dadas las expectativas de que la producción no aumentará significativamente este año, los ingresos petroleros disminuirán en 2020, generando una presión moderada en las finanzas de las entidades federativas, al mismo tiempo que la desaceleración en el crecimiento económico.
“Tras la contracción de 0.1 por ciento en el PIB de México en 2019, esperamos un incremento de solo 0.9 por ciento en 2020 y este lento crecimiento debilitará la recaudación de impuestos que también fondean las participaciones federales.
“Incluso antes de la caída del precio del petróleo, el gobierno proyectó un crecimiento de las participaciones de apenas 3.9 por ciento en términos nominales en 2020, muy por debajo de la tasa de crecimiento promedio de 8.5 por ciento de los últimos cinco años”.
Moody’s estima que en un escenario en el que los precios no se recuperan a lo largo del año, el crecimiento de las participaciones sería menor que 3.9 por ciento proyectado en el presupuesto, aunque ciertos factores ayudarían a limitar el déficit.
Por un lado, el peso de los ingresos petroleros respecto a las participaciones ha disminuido en los últimos años. Entre 2012 y 2014, por ejemplo, los ingresos petroleros representaron en promedio 29 por ciento del Fondo general de participaciones en comparación con el promedio de 12 por ciento entre 2017 y 2019.
Aunque “anticipamos un crecimiento limitado en las participaciones debido a los bajos precios del petróleo, las entidades federativas se beneficiarían del Fondo de Estabilización de los Ingresos de las Entidades Federativas (FEIEF), el cual es un fondo de contingencia, que compensaría cualquier déficit entre las participaciones presupuestadas y las realizadas en 2020.
“Ello ayudaría a aliviar el estrés de los estados este año, pero dejaría un colchón más pequeño para absorber choques futuros. El FEIEF cuenta actualmente con recursos suficientes para absorber una caída de hasta 6.4 por ciento en las participaciones presupuestadas para 2020.
La Jornada / Israel Rodríguez