México.- Es un debate que crece: en México muchos se preguntan por qué las autoridades no han adoptado medidas drásticas para contener la pandemia de Coronavirus, como sucede en otros países.
Hasta ahora existe una revisión aleatoria de pasajeros en vuelos y cruceros internacionales, pero no se han emitido restricciones de ingreso a puertos y aeropuertos.
Hay una intensa campaña de información sobre los cuidados personales para prevenir un contagio.
Pero no se han restringido eventos masivos, ni tampoco hay escuelas o empresas cerradas como sucedió en 2009 durante la epidemia de AH1N1 que surgió en este país.
Tampoco se han realizado pruebas masivas en la población para detectar posibles casos.
Estas medidas provocan críticas, aunque las autoridades aseguran que sus decisiones ante la pandemia de Coronavirus están justificadas.
Lecciones de 2009
La estrategia ante el fenómeno, dice el subsecretario de Salud Hugo López-Gatell, es parte del aprendizaje de México al enfrentar la pandemia de gripe A hace 11 años.
“Una de las experiencias más educativas fue la pandemia de 2009, nos dejó lecciones muy útiles” afirma el experto a BBC Mundo.
En 2009 López-Gatell era el responsable de epidemiología en la Secretaría de Salud cuando la crisis por el AH1N1 surgió en este país.
En esa posición le tocó enfrentar la aparición de la gripe porcina en el país, como en su momento se llamó a la epidemia.
Una década después el fenómeno se repite, aunque de acuerdo con el subsecretario ahora México está más preparado que en aquel momento para atender la emergencia.
En el país hay 16 casos confirmados de Coronavirus, aunque se prevé que la cantidad aumente en las próximas semanas.
De hecho la estrategia de la Secretaría de Salud contempla tres escenarios en la expansión de la pandemia: el primero es el actual, donde las personas contagiadas adquirieron el virus fuera del país.
El siguiente implica la transmisión comunitaria, es decir que los contagios son locales con cientos de casos confirmados, y el escenario 3 donde la cantidad de personas con el virus serían miles.
País en operación
El aprendizaje de 2009 se aplica ahora ante la llegada del Coronavirus a México. Un ejemplo es la decisión de mantener el funcionamiento normal del país ante la pandemia.
Hace 11 años, cuando apenas se había detectado la propagación de una variante de virus de influenza desconocido -luego se clasificó como AH1N1- el entonces presidente Felipe Calderón declaró un estado de emergencia sanitaria.
A pesar de que sólo había 7 casos confirmados ordenó la suspensión de clases en todo el país, así como la cancelación de actividades en todos los espacios públicos.
Eventos masivos como encuentros deportivos o conciertos de música fueron suspendidos.
La virtual cuarentena provocó graves consecuencias económicas. Miles de reservaciones para los destinos turísticos fueron canceladas.
En algunas ciudades cerró la mayoría de los comercios. Bancos, empresas y hasta el servicio público restringieron operaciones.
Es una de las lecciones que ahora se recuerdan, dice el subsecretario de Salud. Hasta ahora, por ejemplo, no existen elementos para declarar un estado de emergencia sanitaria en el país.
Tampoco para restringir el ingreso de pasajeros internacionales, o incrementar la revisión en los puertos fronterizos, como sucedió en 2009.
“La evidencia de salud pública muestra que estas intervenciones son de poca utilidad, y en algunos casos de nula utilidad” explica el funcionario.
En cambio, como sucedió hace 11 años, aplicar esta medida puede ser contraproducente, especialmente en áreas como el turismo y el tráfico aéreo.
“No tienen un fundamento científico sólido. En toda la historia de las epidemias no hay demostración científica alguna de que estas medidas extremas pudieran ayudar a disminuir el riesgo de transmisión” añade.
“Tampoco ayudan, porque tienen gravísimas consecuencias económicas y sociales”.
En 2009 la decisión de suspender casi todas las actividades del país costó el 0,7% del Producto Interno Bruto, según datos de la Secretaría de Hacienda.
BBC