México.- México es el mayor comprador de gasolina estadounidense, sin embargo hoy Petróleos Mexicanos (Pemex) argumenta causas de fuerza mayor para impedir la descarga de, al menos, 60 embarcaciones que transportan el combustible y permanecen varadas en las costas del Atlántico y el Pacífico.
Una fuente consultada por Bloomberg informó que la causa de “fuerza mayor” se argumenta cuando ocurren eventos inesperados que impiden e imposibilitan cumplir con sus obligaciones. Pero el Presidente Andrés Manuel López Obrador confirma que México planea lograr la autosuficiencia en materia de combustibles.
“Decirles que nosotros ya tenemos un plan que consiste en refinar la mayor cantidad de crudo del país en vez de estar a expensas del mercado internacional vendiendo petróleo y comprando gasolinas vamos a producir cada vez más gasolinas en el país hasta lograr la autosuficiencia y no vender ni un sólo barrildepetróleo crudo. Hacia allá vamos”, auguró el mandatario mexicano este viernes en su conferencia de prensa.
Le demanda de petróleo crudo a nivel internacional ha anotado sus peores bajas por la pandemia global del nuevo coronavirus (COVID-19). Ante la emergencia mundial, la Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus aliados (OPEP+) sostuvieron reuniones de emergencia para acordar reducciones en la producción petrolera.
En un histórico acuerdo de reducción se dispuso un recorte de la producción del 23 por ciento a nivel mundial y México acordó reducir su volumen en 9.7 mil barriles diarios, lo que supone un 5.5 por ciento de su industria, y Estados Unidos compensará dicho recorte con 250 mil barriles extra.
Una sobreproducción y menores necesidades del hidrocarburo tiraron los precios de las principales mezclas que, en el caso del West Texas Intermediate (WTI), mezcla de referencia en Estados Unidos, que llegó a pagar más de 30 dólares para deshacerse de sus barriles un par de días antes del cierre de las cotizaciones de los futuros de mayo. Además, el índice de referencia internacional: el crudo Brent, que ya cotizaba en el contrato de futuros de junio, se negoció un 8.9 por ciento más bajo y cotizó a 25.58 por barril.
La mezcla mexicana de exportación se vio arrastrada por la caída en los precios del crudo internacional. El 20 de abril cayó un 116.52 por ciento y cerró la sesión en nivel negativo, por primera vez en su historia en -2,37 dólares por barril, desde los 14.35 dólares anteriores y la cotización esperada por el Gobierno de López Obrador de más de 49 dólares.
Ante los mínimos históricos de cotización del crudo, el Gobierno de México delineó un plan a partir del que el país deje de vender el hidrocarburo y se enfoque en la producción de combustibles hasta lograr la autosuficiencia. Bloomberg detalló que el consumo de gasolinas en las estaciones de servicio en México ha caído 50 por ciento debido a las medidas de distanciamiento social requeridas para evitar la propagación del COVID-19.
Sin Embargo