México.- Como parte de la política emprendida por el Poder Judicial estatal para despresurizar las cárceles mexiquenses que enfrentan el problema de la sobrepoblación, y en el contexto del Covid-19, este martes un juez del distrito judicial de Ecatepec, concedió la libertad anticipada a 29 personas privadas de su libertad, que habían sido sentenciadas por delitos que no ameritan prisión por más de seis años, en el Centro Preventivo y de Reinserción Social de Ecatepec, conocido como Chiconautla, por lo que podrán compurgar su sentencia fuera de prisión.
Debido a la contingencia sanitaria, el Poder Judicial acordó acelerar los procedimientos para otorgar ese beneficio bajo el esquema de los brazaletes. En condiciones normales, el proceso lleva entre seis y ocho meses, pero por las condiciones sanitarias actuales, se ha pedido a los jueces acelerar los procedimientos y dictar las preliberaciones pertinentes.
Los presos podrán ser excarcelados en las próximas horas —27 son hombres y dos mujeres, todos primodelincuentes y que han mostrado buena conducta en su reclusión—, bajo el mecanismo de libertad anticipada, que consiste en la colocación de un brazalete electrónico que les será colocado en algún tobillo y con las que serán monitoreadas las 24 horas los siete días de la semana.
Con ello, El reo que obtendrá su libertad anticipada, podrá reinsertarse a la sociedad de forma normal mediante un empleo u oficio que garantice su sustento. Además estará obligado a firmar semanalmente en un juzgado y en caso de incumplir con las medidas disciplinarias que se le fijan, podrá ser remitido de nuevo a la cárcel para purgar el resto del tiempo que le queda de condena.
En los meses recientes, el Poder Judicial ha concedido mil 835 libertades anticipadas a reos, bajo el esquema de brazaletes electrónicos, hoy en día se monitorea a dos mil 786 personas que portan brazaletes y que han sido externados de las cárceles mexiquenses.
En el Poder Judicial están siendo evaluadas 80 solicitudes más de preliberación, que serán dictaminadas la semana entrante.
“Estas acciones forman parte de un programa de preliberaciones anunciado por el titular del Poder Judicial, Ricardo Sodi Cuellar. En él se incluye el diseño de un programa a fin de que los sentenciados por delitos no violentos, obtengan beneficios preliberacionales, después de la calificación de los Centros de Readaptación Social”, difundió.
Los jueces de ejecución mantienen la revisión constante de los expedientes que se ventilan en los diversos juzgados, para verificar posibles internos candidatos a obtener beneficios preliberacionales, acción que se realiza en conjunto con la Dirección General de Prevención y Reinserción Social del Estado.
La Jornada / Israel Dávila y Javier Salinas Cesáreo