José C. Serrano.
Cualquier ciudadano en este país requiere, para tramitar un pasaporte, recoger resultados de un estudio de laboratorio, comprar un boleto de avión, retirar su dinero de un banco, recibir un paquete por mensajería, inscribirse en una universidad, etcétera, de la credencial del IFE/INE. El comprobante de identidad más importante en México: una aberración, en tanto que su uso debería limitarse al ámbito electoral.
Va un poco de historia:
El Instituto Federal Electoral (IFE) fue la entidad responsable de cumplir con la función de organizar las elecciones federales en México, principalmente las relacionadas con la elección del presidente de la República, diputados federales y senadores integrantes del Congreso de la Unión. Fue la máxima autoridad administrativa en materia electoral en el período 1990-2014.
El IFE sustituyó a la Comisión Federal Electoral (CFE). Nació como resultado de los conflictos poselectorales de 1988, que provocaron una serie de reformas a la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos (CPEUM), aprobadas el 4 de abril de 1990 y publicadas el día 6 del mismo mes y año, y la expedición de una nueva legislación reglamentaria en materia electoral: el Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales (COFIPE), el 15 de agosto de 1990. El primer presidente del Consejo General fue Fernando Gutiérrez Barrios, entonces titular de la Secretaría de Gobernación (SEGOB).
La reforma constitucional publicada el 10 de febrero de 2014, dio origen al nacimiento del Instituto Nacional Electoral (INE), en sustitución del extinto IFE. Es el organismo autónomo responsable de organizar las elecciones en todo el territorio mexicano, en coordinación con los organismos públicos locales electorales de las entidades federativas, quienes se encargan de las elecciones de gubernaturas, diputaciones locales y alcaldías.
El 3 de abril de 2014, Lorenzo Córdova Vianello fue elegido como su primer presidente; inició formalmente operaciones el 4 de abril de ese mismo año. La gestión de Córdova Vianello no ha estado exenta de severas críticas por parte de los representantes de partidos políticos y de la opinión ciudadana, debido a su arrogancia y su desmedido apego a la nómina costosa.
Todas las actividades que desarrolla el INE se rigen principalmente por la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales. Para llevarlas a cabo ha requerido de una estructura que es un monumento a la obesidad: Consejo General, Junta General Ejecutiva, Secretaría Ejecutiva, Órgano Interno de Control, y 11 consejeros electorales, incluido el consejero presidente.
En días recientes, en su conferencia mañanera, el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), ha expresado que el aparato del INE es de los más costosos del mundo. Cuestionó a sus integrantes sobre qué tan complicado es organizar una elección limpia y libre.
El INE es un organismo hipertrófico tan sólo con la expedición y control de la credencial para votar. AMLO podría comenzar su programa de adelgazamiento de dicho aparato, quitándole tal prerrogativa y, que el ciudadano se identifique con cualquier documento legal. El procedimiento no es oneroso y contribuye a desmitificar una práctica abusiva.
