La Armada de Estados Unidos confirmó este viernes la destitución del comandante del portaaviones nuclear USS Theodore Roosevelt, despedido tras criticar la gestión de la fuerza de un brote de Covid-19 en su nave.
El capitán Brett Crozier “no será reincorporado” como comandante del USS Theodore Roosevelt y “no será elegible” para comandar otros buques, pues tomó decisiones “cuestionables” durante el brote, dijo el almirante Michael Gilday, jefe de operaciones de la Armada de Estados Unidos.
En una rueda de prensa, Gilday también criticó al contralmirante Stuart Baker, el supervisor directo de Crozier como comandante del grupo de ataque del portaaviones, por lo que consideró un liderazgo deficiente de la situación, por lo que su promoción queda “suspendida hasta nueva orden”.
Los dos hombres “fracasaron en resolver el problema (de la covid-19) y en asumir sus responsabilidades, y en varias ocasiones colocaron el confort de la tripulación por encima de la seguridad de la tripulación”, señaló Gilday.
“Creo que tanto el Almirante Baker como el Capitán Crozier se quedaron cortos en lo que esperamos de los que están al mando”, dijo Gilday, que considero además que no actuaron “lo suficientemente rápido, para cumplir con su obligación primaria” de mantener a los 5.000 tripulantes del barco a salvo.
El comandante Crozier había llamado a fines de marzo en una dramática carta a evacuar su barco, inmovilizado en la isla de Guam, en el Pacífico, tras haberse detectado a bordo varios casos de covid-19.
El portaaviones fue finalmente evacuado y la tripulación puesta en cuarentena en una base estadounidense y en hoteles de la isla. Un millar de los marinos dieron positivo al nuevo coronavirus y uno falleció.
El brote a bordo del Roosevelt fue una de las primeras crisis estadounidenses de la pandemia, paralizando el enorme barco y obligándolo a permanecer más de un mes en Guam.
El caso salió a la luz después de una carta de Crozier que se filtró a los medios a finales de marzo. En la misiva se quejaba de la falta de apoyo para hacer frente al brote.
Mientras que una investigación inicial parecía apoyar las quejas de Crozier, una indagatoria más profunda mostró que tanto él como Baker no supieron tomar el mando ante la crisis, dijo Gilday.
No lograron evacuar rápidamente a los marineros del barco a las instalaciones en Guam, dijo, al señalar que Crozier se centró más arreglar habitaciones de hotel en lugar de aceptar instalaciones ya preparadas en los gimnasios.
El asunto provocó en su momento preocupación sobre posibles brotes en otros barcos, así como cuestionamientos sobre la disposición del gobierno y el Pentágono para hacer frente a la pandemia.
La publicación de la carta tuvo una fuerte reacción. El entonces Secretario de Marina Thomas Modly despidió a Crozier y voló a Guam para dar un desafiante discurso a la tripulación, en el que acusó a Crozier de “traición”.
Cuando esto se hizo público, el mismo Modly fue obligado a renunciar.
“Todos los integrantes de la cadena de mando tuvieron un papel en la respuesta inadecuada, incluyendo al entonces Secretario de Marina Modly, dijo el congresista Adam Smith, presidente de la Comisión de Servicios Armados de la Cámara de Representantes.
AFP