La Oficina de Prensa de la Santa Sede informó este 1 de marzo que el estado clínico del Papa Francisco permanece estable y sin broncoespasmos.
“Alternó ventilación mecánica no invasiva con largos periodos de oxigenoterapia de alto flujo, manteniendo siempre una buena respuesta al intercambio gaseoso”, señaló en un comunicado.
La Santa Sede detallo que “el Santo Padre está afebril y no presenta leucocitosis. Sus parámetros hemodinámicos se han mantenido siempre estables; ha continuado alimentándose por sí mismo y ha realizado regularmente fisioterapia respiratoria, cooperando activamente. No ha presentado ningún episodio de broncoespasmo”.
“El Santo Padre está siempre vigilante y orientado. Por la tarde ha recibido la Eucaristía y después se ha dedicado a la oración. El pronóstico sigue siendo reservado”.