Rubén Cortés.
Es un fracaso económico bestial: en diciembre se cumplió un año de que el gobierno de López Obrador compró Mexicana de Aviación, en diciembre, esta administración le metió casi mil millones de pesos a la aerolínea. Ayer, Mexicana cerró ocho de sus 17 rutas.
El grupo político que gobierna en el país desde 2018 está empeñado en gastar más dinero del que produce la capacidad económica de México, lo cual equivale a una familia que consuma más de lo que ingresan sus miembros en salario. ¿Resultado? Deuda o quiebra.
Pero el caso de Mexicana es emblemático: López Obrador compró la marca en agosto de 2023, en 815 millones de pesos, aunque había quebrado: hoy, por cada pasajero, ingresa 927 pesos, pero cuesta cinco mil trasladarlo. Es un fiasco.
La herencia económica de López Obrador es un barril sin fondo, de cual no se ven las consecuencias hoy mismo, porque México vive del tratado comercial con EU y Canadá, que le deja la descomunal cifra de 300 mil millones de dólares: eso salva al país de la ruina.
El gobierno mexicano gastará 11 de cada 100 pesos del Presupuesto para 2025 en reparto de dinero sin revisión para que su uso sea eficiente y, realmente, beneficie a la población: se va en becas para ganar votos y en subsidiar obras de López Obrador.
Por ejemplo, el Tren Maya no sirve: en un año transportó 600 mil pasajeros, de los tres millones que tenía programados. Ese tren genera 134 millones de pesos, y tiene que ser sufragado con 12 mil millones. Es dinero tirado con singular alegría.
Además, la refinería de Dos Bocas no produce un solo barril de petróleo, aunque López Obrador la inauguró en julio de 2022 y se gastó en construirla 20 mil millones de dólares, de los ocho mil millones que costaría. Más dinero al barril sin fondo.
El dinero decentemente gastado serían los 835 mil millones de pesos destinados a los programas sociales. Sin embargo, los programas sociales tienen que ser revisados para que beneficien a quienes de verdad los necesitan.
Porque los programas sociales, al ser usados únicamente para comprar votos, son otorgados a tontas y a locas: en el caso de los adultos mayores, llegan lo mismo a quien gana 30 mil pesos que a quien no tiene para comer: son populismo barato que sale caro.
Mexicana de Aviación y el resto de los proyectos lopezobradoristas representan la incapacidad de la 4T para gestionar el dinero de nuestros impuestos y las ganancias del T-MEC. Todo, perpetuando la ineficiencia y el desperdicio.
Un legado fatal para quienes hoy están por debajo de los 25 años de edad.
Aquí, tendrán una madurez amarga.