Washington.- La exposición directa a la violencia armada, bien sea por presenciar un tiroteo o por recibir un disparo, tiene una “fuerte relación” con el hecho de empezar a portar armas entre los jóvenes o adolescentes, señala el estudio de investigadores tras 25 años de seguimiento a un grupo de menores en EE.UU.
Investigadores de las universidades de Cambridge, Pensilvania y Harvard han estudiado los patrones de uso y tenencia de armas en adultos y jóvenes de un grupo de menores originarios de Chicago durante casi tres décadas (1995-2021) para determinar cuándo y por qué los ciudadanos de EE. UU. empiezan a portar armas, así como el tiempo que las llevan.
Según recoge el estudio, la motivación para tener un arma cambia dependiendo de la edad en la que empiezan a llevarla.
Los que se inician de más jóvenes, bautizados como portadores adolescentes, suelen empezar a portar armas como una reacción tras ser testigos de un acto violento en EE.UU.
EFE