Washington.- La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) expresó este martes su profunda preocupación por la polémica reforma judicial de México, que establece la elección popular de los jueces, y afirmó que “monitoreará” su implementación para vigilar que se respete la independencia del Poder Judicial.
“Tender a la democratización de la justicia no puede ir en contra de otro principio básico del sistema interamericano que es el de la independencia judicial”, advirtió durante la audiencia Andrea Pochak, relatora del organismo para México.
La audiencia se celebró en Washington tras la queja interpuesta ante la CIDH por parte de jueces y trabajadores del Poder Judicial en contra de la reforma promulgada el 15 de septiembre por el hoy expresidente Andrés Manuel López Obrador y que cuenta con el respaldo de la nueva mandataria, Claudia Sheinbaum.
El Gobierno mexicano sostiene que los ciudadanos deben poder elegir a los jueces y defiende la constitucionalidad de la reforma, dado que fue aprobada por una amplia mayoría del Congreso.
Pochak dijo que la CIDH seguirá “monitoreando” la implementación de la reforma, a la vez que se comprometió a mantener un “diálogo permanente con el Estado” porque México siempre ha sido “muy respetuoso” con el sistema interamericano de derechos humanos.
EFE