Defensores de los derechos de los inmigrantes en Estados Unidos recordaron este sábado Día de Muertos a los inmigrantes que perdieron la vida bajo la custodia del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE, en inglés), entre los que se cuenta un mexicano que falleció hace menos de una semana.
Altares adornados con las tradicionales flores anaranjadas de cempazuchitl, velas y pan de muertos se replicaron frente a las entradas de un buen número de centros de detención de ICE, manejados en su mayoría por compañías privadas como CoreCivic, que administra la cárcel migratoria de Otay Mesa, ubicado en la frontera de California y México.
“Lo humano y lo sensible es por lo menos venir a recordar sus nombres”, dijo a EFE la activista Adriana Jasso, del Comité de Servicios de los Amigos Americanos, mientras instalaba el altar con los nombres se los inmigrantes fallecidos en custodia en el centro de Otay.
Muertos con nombres en la memoria de todos
Recordaron, por ejemplo, a Agustín Ramírez Arreola, un mexicano que pereció a los 46 años de edad en julio del 2018; y al ruso Igor Zyazin, que perdió la vida en el 2020 también a los 46 años de edad.
En el estado de Washington hoy se recuerda al mexicano José Manuel Sánchez Castro, que falleció en el Centro de Detención del Noroeste, ubicado en la ciudad de Tacoma y que dirige la compañía Geo Group.
Según los registros de la llamada al 911, a la que tuvo acceso La Resistencia, una organización defensora de los derechos civiles de esa zona, el inmigrante estuvo por cinco días en aislamiento médico tras ser trasladado a ese centro.
El mexicano fue encontrado inconsciente pero aún respiraba cuando la enfermera llamó al servicio de emergencia. Los activistas concentran sus críticas en la deficiente respuesta médica de los centros de detención.
En San Francisco (California), grupos de derechos de los inmigrantes recordaron a las 19 personas muertas en las cárceles migratorias de Mesa Verde y Golden StateAnnex.
Con información de EFE