Raúl Flores Martínez.
La hipocresía es un acto que muchos políticos practican diariamente en México, más en los últimos seis años dónde todos los que estaban en el poder, se sentían ungidos por una divinidad.
Tan santos que hasta se creían que orinaban agua bendita, esto lo digo por lo que se ha estado revelando del remedo, de la imitación más jodida de López Obrador que aun gobierna Veracruz, me refiero a Cuitláhuac García Jiménez.
Criticaba tanto a la oposición qué en su papel de remedo de santidad, fue construyendo en su administración una elaborada red de 227 empresas fantasma creadas entre 2019 y 2022 cuyos representantes legales son jóvenes inscritos en los programas sociales para desviado más de 5 mil millones de pesos del erario.
El modo de operar de los funcionarios de las Secretarías de Salud de Veracruz es otorgar contratos directos a personas físicas y empresas constituidas con direcciones de domicilios particulares, terrenos baldíos e incluso tiendas de abarrotes en colonias populares.
Las irregularidades se han encontrado en la Secretaría de Salud de Veracruz que entregó de manera directa contratos millonarios por la prestación de servicios e incluso hay un caso que debe de investigarse a fondo, el caso de la profesora Araly Rodríguez Vez a quién se le entregaron 39 contratos por 100.9 millones de pesos.
Las dependencias de las que recibió jugosos contratos son la Secretaría de Salud, el DIF estatal, el Instituto Tecnológico de Perote y los más recientes con la Secretaría de Seguridad de Veracruz.
60 millones se entregaron por medio de la secretaría de Salud, 40 millones de la secretaría de Seguridad Pública, en una vende uniformes, en otra, vendía implementos, batas, implementos para para doctores y adicionalmente vendió despensas.
Rodríguez Vez presentó el RFC OVA760547X2 que, de acuerdo con el portal de la Secretaría de Hacienda, es incorrecto y la dirección fiscal Prolongación de las Flores 75, Los Sauces, Poza Rica, Veracruz que es la dirección de una modesta tienda, con esto se identificó como la proveedora 32804 de la Secretaría de Finanzas y logró los contratos vía adjudicación directa.
En el rubro de empresas, una de las que más beneficiadas es la empresa Catoch Constructora, Comercializadora y Proyectos Integrales, S. A. de C. V., cuyo dueño es el político de extracción morenista Baruch García Bocarando constituyó en octubre de 2021, en los siguientes dos años sumó 31 millones 803 mil pesos en contratos públicos con la Comisión del Agua del estado, la Secretaría de Salud y el municipio de Misantla.
Entre los accionistas de la empresa está Stephanny de 22 años y quien aparece como beneficiaria de la Beca para Estudiantes de Nivel Medio Superior, y como representante legal Marisol “N”, las dos proporcionaron domicilios fiscales en casas particulares donde no las conocen. En otros casos emblemáticos, está la empresa Cominsh S.A de C.V Comercializadora de productos al por mayor, cuya administradora única es Maricela Luna Martínez, con dirección fiscal en Cofre de Perote 487 de la colonia Los Volcanes, dirección que se ubica en un fraccionamiento popular de Veracruz.
Queda claro que el desvió de cinco mil millones de pesos de la administración de Cuitláhuac García Jiménez, son triangulados a través de las 227 empresas “factureras” que a través de contratos que van de 500 mil pesos o millones de pesos buscan borrar las huellas para dar con el paradero del dinero del erario que ha desaparecido desde el inició de la actual administración.