La diputada Noemí Luna Ayala, coordinadora del Grupo Parlamentario del PAN, afirmó que el último sexenio representó un retroceso de 30 años para México; “nos costará mucho tiempo y esfuerzo reconstruir al país” y la democracia.
En un comunicado refirió que el sexenio 2018-2024 se ubica como “el más sangriento y corrupto de la historia”, puesto que los discursos de combate a la corrupción, el lema de “no robar, no mentir y no engañar” y la “Cartilla Moral” sólo fueron frases y promesas de campaña, y ninguna se cumplió.
Entre los graves problemas que deja el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, Luna Ayala identificó la crisis de seguridad, con casi 200 mil homicidios dolosos con los que concluye, el registro de una desaparición cada hora en la nación, la constante violación de los derechos humanos y la normalización de la impunidad y corrupción.
Señaló que el adeudo en salud es grande, porque nunca nos acercamos a Dinamarca: la extinción del Seguro Popular dejó sin acceso a los servicios a 15.1 millones de personas, hubo escasez de medicamentos y por la deficiente gestión de la pandemia de Covid-19 fallecieron 800 mil mexicanos.
En materia económica explicó que hubo bajo crecimiento, que promedió 0.2 por ciento, lejos del 4 prometido, caída de 15 por ciento en inversión extranjera directa, endeudamiento que concluye en 17 billones de pesos y la precariedad laboral tiene en la informalidad al 56.1% por ciento de trabajadores.
Luna Ayala dijo que las megaobras sexenales son “barril sin fondo” y símbolo de la opacidad y corrupción. Como muestra puso al Tren Maya, cuyo presupuesto aumentó 70 por ciento en relación inicial, la refinería Dos Bocas no produce combustible y Pemex está al borde de la quiebra por la acumulación de pérdidas billonarias.
Finalmente, manifestó que “el que concluye es un sexenio perdido para México. No hay nada que celebrar, dado que el régimen de la transformación de cuarta finaliza con muchas deudas y pocos logros, por lo que el PAN está listo para encabezar la reconstrucción”.