Primer error de Sheinbaum

Por. Ah-Muán Iruegas

Cuando aun no ha asumido la presidencia constitucional, Claudia Sheinbaum cometió su “primer error como primera Presidenta”. Aunque son ya dos los problemas internacionales recientes, que el oficialismo ha generado a México.

Se metió Claudia en un pleito con España, cuando México necesita de su apoyo. Y fue por un motivo dudoso: que no le contestaron una carta que AMLO previamente le dirigió al rey.

El presidente de USA, Joe Biden, que nos puede afectar más que el mismísimo rey de España, tampoco contestó cartas que le dirigió el gobierno mexicano. Y no hizo Claudia Sheinbaum un “papelito” al respecto.

México requiere mantener relaciones de cordialidad con la mayor cantidad de países posible, con excepción de algunos “parias” del mundo civilizado, como el Apartheid de Sudáfrica en su momento.

Con España, los intereses de México son mayúsculos. España es el segundo inversor en nuestro país, y sus inversiones son en áreas muy variadas. Desde las energías limpias, al turismo y el sistema financiero, las inversiones españolas deben ser bienvenidas, pues traen progreso y empleo a nuestro país.

Además, España es una voz proclive a México en el concierto europeo. Y su apoyo es indispensable para la continuidad de nuestro tratado con Europa.

Se actualiza o revisa nuestro tratado con Europa próximamente; el apoyo a las posturas de México por el gobierno español es crucial para representarnos ante Europa. Pero con la “escenita” que Claudia protagonizó, España no nos va a apoyar.

El primer error de Sheinbaum consiste entonces en que está anteponiendo sus simples apreciaciones ideológicas sobre la conquista española, antes que los intereses objetivos de México.

Los intereses nacionales requieren el refrendo del actual tratado México-Europa. Que, por cierto, tiene cláusulas sobre derechos humanos en los que nuestro país tiene un déficit, sobre todo con la militarización del país. Que la señora presidente, niega como un infante.

Otra infanta, la española Leonor que sucederá al Rey, supuestamente recibió como premio de consolación a la Corona española, una invitación a la toma de posesión de Claudia. Pues de modo increíble, el gobierno de México tuvo la estrambótica idea de no invitar al rey de España.

Por otra parte, en otro error que también se puede atribuir a Sheinbaum -meciendo la cuna con su mano- lo instrumentó Marcelo Ebrard, quien junto con Juan Ramón de la Fuente prepararon la respuesta que se dio a un anterior roce con los estadounidenses.

La postura que se está teniendo frente a los Estados Unidos, esa sí de verdadera y profunda confrontación de fondo -al menos de índole económica- es la aprobación de las reformas constitucionales de Morena y aliados.

Las reformas contravienen diversos aspectos del tratado comercial mexicano-estadounidense T-MEC, que requiere tribunales independientes y órganos autónomos al menos en telecomunicaciones y temas de competencia económica.

Tenemos entonces que ya son dos los tratados mexicanos que podrían afectarse por los errores de Claudia y Morena: el tratado con Europa y el T-MEC. Ambos tratados encarnan en cierto modo los intereses mexicanos y debieran ser apoyados por sus “autoridades”.

La falta de eficacia diplomática de Sheinbaum es patente. Yo le sugeriría que entregue la política exterior al Servicio Exterior Mexicano (que nunca cometería los infantiles errores de la “señorita Claudia” ).

La canciller de AMLO en cambio, sí hizo lo indicado al promover un “acto de desagravio” para con los españoles, luego del desaguisado que se causó por la “genial intervención” de Claudia Sheinbaum.

México tiene intereses y la Señora Presidenta no los está defendiendo. Pues atiende principalmente los caprichos ideológicos y las interpretaciones históricas del hombre que parece dirigir “a control remoto” la política exterior en el sexenio de Claudia: Andrés Manuel López Obrador.

Número de vistas 281

Clima

CIUDAD DE MÉXICO

Hoy no circula

Tipo de cambio

Tipo de cambio USD: sáb, 5 Oct.

Lo último

Notas relacionadas