París.- El Gobierno francés se puso en modo electoral, con acciones en múltiples frentes, en un intento de enjuagar la fuerte ventaja que le lleva el ultraderechista Renovación Nacional (RN) en los sondeos de intención de voto para los comicios legislativos.
Con un país que apenas acaba de asumir la nueva convocatoria tras las europeas del pasado domingo y que asiste asombrado a la posibilidad de que el RN pueda acceder al Gobierno, la campaña electoral ha comenzado de forma extraoficial de forma brutal.
La ofensiva del Ejecutivo comenzó con el anuncio de una serie de medidas en distintos campos en los que el RN ha conseguido superarle en la percepción de buena parte de los franceses, como más dureza contra la delincuencia y la violencia juveniles y más control sobre las actividades ilegales de los presos en las cárceles.
EFE