En su conferencia de prensa matutina, el presidente Andrés Manuel López Obrador afirmó que la entrada ilegal de policías a la embajada de México en Ecuador la noche del viernes 5 de abril fue un acto autoritario y violatorio de la soberanía nacional, que derivó en la suspensión de las relaciones diplomáticas con aquel país.
“Fue una violación flagrante a nuestra soberanía, al derecho de asilo y a las normas y leyes internacionales; fue un acto autoritario, increíble”, subrayó.
El mandatario planteó que el gobierno de Ecuador actuó de esa manera porque, posiblemente, está mal aconsejado por asesores, “gente que actúa de acuerdo a sus intereses”.
“Yo creo que están muy mal aconsejados los que tomaron esa decisión. (…) No quieren al pueblo ecuatoriano, que es pueblo —como aquí se ha expresado— bueno, noble, un pueblo hermano, pero quienes tomaron esa decisión o no saben o tienen malos instintos o de plano están mal aconsejados porque siempre hay zalameros que meten sus narices. (…) Ojalá le vaya muy bien al pueblo de Ecuador”, expresó.
Además de violar la soberanía, el asalto a la embajada atentó contra el derecho de asilo y los tratados internacionales en una muestra de prepotencia del gobierno ecuatoriano, apuntó el jefe del Ejecutivo.
En Mazatlán, acompañado de integrantes del Gabinete, destacó la solidaridad manifestada por la comunidad internacional. De acuerdo con información de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), 29 países —entre los que destaca Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Guatemala, Honduras, Uruguay y Argentina—, la Unión Europea y ocho organismos se han pronunciado a favor de México.
“Agradecer mucho a los presidentes, jefes de Estado, a los diplomáticos, a las cancillerías de todos los países, muchas gracias de todo corazón. México está muy agradecido del comportamiento de la comunidad internacional, de las naciones, porque han sido muy generosos, muy fraternos, muy solidarios; unos con más empuje, énfasis, otros con apego estricto a lo que establece la legalidad y otros a su manera, pero la mayoría apoyando a México”, enfatizó.
- En este marco, la secretaria de Relaciones Exteriores, Alicia Bárcena Ibarra, informó que México prepara una denuncia ante la Corte Internacional de Justicia. Además, solicitará el respaldo de las cancillerías y de los países de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) y enviará una carta al secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para que se presente ante todos los países miembros, el Consejo de Derechos Humanos y la Asamblea General.
Reiteró que nada justifica la irrupción de las fuerzas de policía en la embajada ni la agresión física y a la dignidad del personal diplomático. Al asilar al exvicepresidente de Ecuador, México se apegó al derecho internacional respecto a la Convención de Viena y a la Convención de Caracas sobre asilo político, acotó la canciller.
Expuso que el gobierno mexicano había mantenido comunicación directa y constante con el Ecuador antes del incidente a fin de abordar el tema del asilo, por lo que debieron recurrir en todo momento a procedimientos pacíficos, tal como lo establece la carta de la ONU o el Tratado Americano de Soluciones Pacíficas, denominado Pacto de Bogotá.
Con el propósito de brindar servicio a alrededor de mil 600 connacionales y 30 empresas en Ecuador, las embajadas de México en Chile, en Colombia y en Perú habilitaron sus servicios. Por ahora no se emitirán documentos presenciales en Ecuador y la atención será vía digital, informó la secretaria.
El Gobierno de México suspendió servicios y relaciones consulares, al tiempo que exigió respeto a los locales, bienes y archivos de la embajada en Ecuador, que quedó cerrada indefinidamente.
La titular de la SRE aseguró que el gobierno mexicano no aplicará las mismas medidas en el caso de la embajada de Ecuador en México y llamó a la población a mantener la calma. En su momento, las autoridades ecuatorianas tomarán decisiones al respecto sin ningún tipo de presión externa.
- A pesar de los secuestro de familias completas en días recientes en Culiacán, Sinaloa, el primer mandatario aseguró que mantendrá sin cambios su estrategia de seguridad.
“Nosotros vamos a mantener la misma estrategia. Nosotros consideramos que los seres humanos no nacemos malos, son las circunstancias las que llevan a algunos a tomar el camino de las conductas antisociales y, si cambiamos esas circunstancias, podemos vivir en una sociedad mejor. (…) Vamos a continuar con esa política para enfrentar el flagelo de la violencia”, reiteró el jefe del Ejecutivo.
El mandatario llamó no estigmatizar al estado por razones de seguridad, rubro que hoy supervisó con integrantes del gabinete en la materia.
Integrantes del gobierno federal informaron que el estado ocupa la posición 24 en el total de delitos de impacto a nivel nacional. Están a la baja los delitos de homicidio doloso, robo de vehículo, trata de personas y secuestro, según datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública correspondientes a febrero.
La estrategia de seguridad se fortalece en Culiacán, Mazatlán, Ahome y Guasave con el propósito de contener la incidencia delictiva en esos municipios que concentran el 84.6 por ciento de los ilícitos, debido a que son los de mayor población. Las fuerzas de seguridad trabajan para revertir la tendencia al alza en robo de transporte, extorsión y robo a casa habitación.
El secretario de la Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval González, dio a conocer que la federación respalda a la entidad con 10 mil 563 elementos operativos del Ejército y de la Fuerza Aérea Mexicanos, de la Secretaría de Marina y de la Guardia Nacional.