Jalisco.- La Verificación Responsable, nombre oficial que lleva el programa de verificación vehicular en Jalisco, además de ser el menos costoso del país, ya genera resultados positivos en el corto, mediano y largo plazo en el Área Metropolitana de Guadalajara (AMG), busca certificar que a través de un correcto mantenimiento las emisiones contaminantes emitidas por los vehículos, se encuentren dentro de la normatividad vigente, beneficiando el medio ambiente al contribuir a reducir el número de días contaminados y fuera de norma, alargando la línea de vida de sus habitantes, y generando ahorros importantes a los automovilistas, ya que quien cumple con esta disposición, evita fallas mecánicas futuras, ahorra hasta un 30% en combustible y garantiza el funcionamiento óptimo del vehículo por más años, además de que contribuye a que cada auto deje de contaminar o contamine menos.
En el 2019, año en que todavía no se implementaba la verificación con el actual modelo, el (AMG) registró 64 días con valores superiores a los 100 puntos IMECA, es decir, 64 días con alta contaminación, mientras que en el año el 2023, fecha en que ya se implementaba dicho programa, la metrópoli solo tuvo 34 días fuera de norma, logrando una reducción de 53% de la contaminación por ozono troposférico.
Los avances registrados en Jalisco son debido al apoyo de ciudadanos que han cumplido y siguen cumpliendo con esta disposición, mejorando la calidad del aire en el AMG, escenario contario a lo que ocurre en el Estado de Nuevo León, donde se vive una crisis por este problema reconocido por sus autoridades. Actualmente se encuentra en el top 10 con las ciudades más contaminadas del mundo, ya que 6 municipios de ese estado son considerados los más afectados por polución a nivel global; en aquella entidad la verificación vehicular es voluntaria, no hay sanciones por incumplirla y no cumple la normatividad federal.
Y aunque el parque vehicular de Monterrey es similar al de Jalisco de acuerdo al Padrón del Instituto de Control vehicular con 2.7 millones de automóviles, las acciones de verificación en dicha entidad no cumplen con la normatividad federal, pero Jalisco sí.
El año pasado el aún titular de SEMADET regiomontano, Félix Arratia Cruz, admitió que en Monterrey hubo dos mil 500 muertes prematuras asociadas a la contaminación y que se preparaba en la entidad una verificación obligatoria dadas las circunstancias, mientras que este año, el nuevo secretario del Medio Ambiente, Alfonso Martínez Muñoz, presentó un nuevo Plan Integral de Gestión Estratégica de Calidad del Aire, pero por alguna razón (podría ser electoral) dejó fuera la verificación y sin consecuencias para los autos que contaminen.
Y aunque Martínez Muñoz anunció en enero de 2024 que las muertes por contaminación iban en descenso, la secretaria de Salud de esa entidad, Alma Rosa Marroquín, contradijo al actual titular de SEMADET al responder que “es imposible determinar ese dato”. En lo que sí coincidieron es que hay una crisis ambiental y partiendo de ello, ambos formaron mesas de trabajo para atender el tema.
¿Qué pasa cuando se verifica un auto?
Al momento de verificar un automóvil, se está garantizando que dicho auto circule bajo los límites máximos permisibles de emisiones (reguladas por la federación), y se asegura que la combustión se dé en óptimas condiciones (bajo norma), es decir, cada auto -afinado y verificado-, no está emitiendo más contaminantes de los permitidos.
Por lo anterior, Jalisco impulsó el modelo de verificación más exitoso de México bajo los siguientes principios operativos:
● Cuenta con la mejor tecnología
● Su logística permite agilizar este proceso en un promedio de 25 minutos
● Es la menos costosa del país con un pago anual de 500 pesos, mientras que en otras ciudades como la Ciudad de México esta medida cuesta mil 354 pesos y se realiza dos veces por año, mientras que en otros estados como Morelos la verificación cuesta mil 353 pesos, en Puebla mil 256 pesos, en Estado de México 829 pesos, en Veracruz 808 pesos, en Querétaro 790 pesos, en Hidalgo 710 pesos, en Michoacán 694 pesos, en Guanajuato 590 pesos y en Tlaxcala 538 pesos.
Años atrás, se llegó aplicar un programa de verificación vehicular que fue suspendido en la pasada administración por su fallida aplicación, ya que, en lugar de ayudar en los objetivos centrales de una disposición de esta naturaleza, fomentó la corrupción, malos manejos en la entrega de hologramas por casi cualquier taller a discrecionalidad, sin importar si los autos pasaban o no la verificación
Sin embargo, en el actual gobierno estatal se tomó muy en serio el tema y se perfeccionó la verificación vehicular tomando en cuenta las siguientes consideraciones:
● Se cuenta con un proveedor único con mediciones homologadas en todos los puntos de servicio (en el modelo anterior había varios proveedores y las mediciones permisibles eran distintas de un equipo a otro)
● Se creó un centro de monitoreo y control remoto en tiempo real, aumentando la capacidad de intervención remota (en el modelo anterior se tenía nula capacidad de control y vigilancia)
● Verificación Responsable cumple con la Norma Oficial Mexicana (NOM)-047-SEMARNAT-2014 (en el modelo anterior se operaba sin norma y a discrecionalidad)
● Se crearon establecimientos exclusivos para la prestación de este servicio (en el modelo anterior el servicio lo atendían talleres mecánicos)
● Se creó nueva estructura orgánica (en el modelo anterior la estructura era deficiente)
● Se reestructuró el marco normativo con mayor cumplimiento (en el modelo anterior la normatividad quedaba en el aire)
La verificación vehicular es algo muy importante debido a que la quema de combustibles producida con el funcionamiento de los autos, implica la emisión de compuestos orgánicos volátiles y óxidos de nitrógeno, mismos que son precursores del ozono (O3), el cual deteriora la salud humana, afectando directamente el aparato respiratorio, las mucosas y causa afecciones pulmonares, como refleja el registro de mortalidad en México en el año 2019, fecha en que más de 48 mil personas perdieron la vida por causas asociadas a esta problemática.
Asimismo, las emisiones de monóxido de carbono (CO), que es otro tipo de gas emitido por los automotores, son sumamente peligrosas para la salud en altas concentraciones, ya que reduce la capacidad oxigenación en la sangre, y en elevadas concentraciones causa la muerte. Mientras tanto, la combustión de los autos que usan diésel, crean material particulado (PM) el cual es lo suficientemente pequeño para almacenarse en los alvéolos, afectando permanentemente el sistema pulmonar y los bronquios.
Con información del Gobierno de Jalisco