El día de ayer, en la sede de la Organización de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (ONUDD), en Viena, Austria, dio inicio el segmento de alto nivel de la 67 Comisión de Estupefacientes (CND), con el objetivo de realizar una revisión de medio término de los compromisos internacionales en materia de política de drogas.
Durante su intervención, el jefe de la delegación mexicana y subsecretario para Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Joel Hernández García, reiteró el compromiso con una transformación de las políticas de drogas hacia estrategias integrales y equilibradas, con más contenido de salud pública, derechos humanos, justicia social, paz y desarrollo sostenible, con una visión que ponga al individuo al centro de las políticas e incluya entre sus piedras angulares la evidencia científica y la prevención.
México se comprometió a promover una “Coalición Global para la trazabilidad de sustancias químicas para evitar su desvío para la fabricación de drogas ilícitas”, que busca contribuir a los esfuerzos nacionales e internacionales en la reducción de su desvío; la correcta disponibilidad para uso industrial, médico y científico; el intercambio de información relacionada con el proceso de regulación y control de sustancias químicas de interés, así como la difusión de las mejores prácticas para evitar la fabricación indiscriminada de nuevas sustancias psicoactivas y drogas sintéticas.
La delegación mexicana estuvo integrada por representantes de la Fiscalía General de la República, la Secretaría de Marina, la Secretaría de Salud y la SRE.
La Comisión de Estupefacientes es el órgano más importante de la ONU para abordar el problema mundial de las drogas. Fue establecida por el Consejo Económico y Social (ECOSOC) en 1946, para ayudar a supervisar la aplicación de los tratados de fiscalización internacional de drogas.
En 2019, la Comisión adoptó la Declaración Ministerial sobre el “Fortalecimiento de acciones a nivel nacional, regional e internacional para acelerar la implementación de compromisos conjuntos asumidos para abordar y contrarrestar, de manera conjunta, el problema mundial de las drogas”.
En la Declaración, los Estados miembros, incluido México, decidieron revisar los avances realizados en la implementación de los compromisos políticos en 2029, con una revisión intermedia en 2024. La Comisión trabaja activamente en el seguimiento de la Declaración Ministerial de 2019, para acelerar la implementación de todos los compromisos internacionales en materia de políticas de drogas.