México.- La precandidata a la presidencia por Morena, Claudia Sheinbaum, presentó al equipo que ahora tienen entre sus manos el reto de crear el “Plan Nacional”, el cual será el cimiento de su gobierno si gana la presidencia de México en 2024.
Este plan de Nación se construirá a través de las mesas de diálogo coordinadas por Juan Ramón de la Fuente, exrector de la Universidad Nacional Autónoma de México y exsecretario de Salud.
Los reponsables de la construcción de este plan serán:
Javier Corral Jurado, abogado, académico y gobernado Constitucional de Chihuahua en el periodo 2016-2021, ha sido diputado del Congreso de Chihuahua, diputado federal y senador de la república.
Gerardo Esquivel Hernández, economista, subgobernador del banco de México, Coordinador de Investigación del Instituto Belisario Domínguez del Senado de la república, ha sido investigador de varios organismos nacionales e internacionales.
Omar García Harfuch, Licenciado en derecho y seguridad pública, fue jefe General de la Policía de investigación de la entonces Procuraduría General de Justica y secretario de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México entre 2019 a 20223.
Altagracia Gómez Sierra, empresaria mexicana, presidenta de Grupo Empresarial PEO.
Susana Harp, psicóloga, política y cantante de música tradicional, desde 2018 es senadora de la república por parte del estado de Oaxaca donde preside la Comisión de Cultura.
Jorge Islas Samperio, físico, maestro en ingeniería energética y doctor en economía aplicada, académico e investigador especializado en la transición energética, sustentabilidad y mitigación del cambio climático.
David Kershenovich, médico e investigador, fue presidente de la Academia Nacional de Medicina, medalla al mérito en Ciencias y Artes 2015 y Premio Nacional de Ciencias 2016.
Lorenzo Meyer Cosío, historiador y académico, Premio de Investigación de la Academia Mexicana de Ciencias, Premio Investigación Histórica “Daniel Cosío Villegas” y miembro emérito del Sistema Nacional de Investigación.
Irma Pineda Santiago, poetisa zapoteca, ensayista, traductora y promotora de los derechos de los pueblos originarios, maestra en educación y diversidad cultural.
Rosaura Ruiz Gutiérrez, científica e investigadora, fue directora de la Facultad de Ciencias de la UNAM, fue presidenta de la Academia Mexicana de las Ciencias, lidero la creación de la Universidad Rosario Castellanos y la Universidad de la Salud.
Olga Sánchez Cordero, jurista y docente, fue la primera mujer notaría pública, fue ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, diputada en 2016 y la primer mujer en ser nombrada como titular de la Secretaría de Gobernación.
Violeta Vázquez Rojas, lingüista, y académica, ha publicado textos de divulgación sobre el lenguaje, ideología y política, codirectora de la revista “Cuadernos de lingüística” en el Colegio de México.
Arturo Zaldívar de la Rea, jurista, catedrático, fundó el Instituto Mexicano de Derecho Procesal Constitucional, fue ministro y presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
La precandidata única por la presidencia de Morena, Claudia Sheinbaum Pardo, explicó que estas mesas de diálogo tienen la finalidad de crear el “Plan de Nación” que ayudarán a construir los métodos de desarrollo del país desde distintas aristas como la económica, social, cultural y política y darle continuidad al “Segundo Piso de la Transformación”.
Sheinbaum Pardo hizo énfasis en el modelo de desarrollo planteado por el presidente Andrés Manuel López Obrador, enfocado en la austeridad republicana que aseguró “ha logrado tener éxito”.
La precandidata detalló que este modelo construye un gobierno eficiente, austero y honesto, además que ahorra recursos destinados a la seguridad y a obras estratégicas que potencian el desarrollo económico, a la par que aumenta los ingresos públicos al evitar la evasión fiscal y la condonación de impuestos.
Ademas, aseguró que el gran reto que tendrá el plan es el de fortalecer las bases del Movimiento de la Transformación que son el acceso y respeto de los derechos de todos los mexicanos, promover la soberanía alimentaria y energética; mantener la inversión pública en la infraestructura, motivar la inversión privada y sostener el “Humanismo Mexicano” que tiene como base la economía desde abajo.