Raúl Flores Martínez.
Veracruz volvió nuevamente a ser uno de los estados favoritos del crimen organizado, las células del Cártel Jalisco Nueva Generación y Pacífico junto con algunas escisiones de disputan el estado, mientras el gobernador Cuitláhuac García pasea quitado de la pena por el país.
De acuerdo con la Información Filtrada del Gabinete de Seguridad, el Cártel de Sinaloa cubre 27 municipios; Pura Gente Nueva-Zetas Vieja Escuela opera en 12 municipios; el Cártel del Noreste y la Célula Independiente “35-Z” operan en cinco municipios cada uno; Fuerza Especial Grupo Sombra en cuatro municipios y el Cártel del Golfo en dos municipios.
Así se distribuyen el estado gobernado por un morenista para no quitar la costumbre que se está dando de que los gobiernos emanados del partido en el poder tienen y protegen al crimen organizado.
Ayer estuve en el Puerto de Veracruz en la conmemoración de los 202 años de la creación de la Armada de México, saludé a algunos colegas del puerto, quienes me pusieron al tanto de lo que sucede en la entidad, balazos, más balazos y ejecutados.
El colapso en la seguridad no se ha dado por una sencilla razón, la policía naval y los elementos de la Armada de México, son los que están haciendo las labores de seguridad algo que le corresponde a la entidad; sin embargo, no hay un trabajo concreto en este rubro.
Algo que también se está dando es la violencia psicológica en el municipio de Veracruz que aumentó en exceso al atender entre 40 y 70 casos de mujeres víctimas de este tipo de violencia.
La muestra la tiene el Instituto municipal de la Mujer de Veracruz que señala que ha rebasado su capacidad para atender todos los casos de violencia psicológica, por lo que han tenido que firmar convenios con especialistas particulares.
La zona norte del puerto de Veracruz, es donde más casos de violencia psicológica han detectado, por lo que la mayoría de los programas van enfocados en esa población.
Con estos datos nos damos cuenta que el mandatario veracruzano, sigue siendo un cero a la izquierda en un gobierno que se va de pique, un gobierno que ha dado cañonazos de dinero a algunos medios de comunicación, mientras a otros los amenazó para que no publiquen notas negativas de su administración.
Es momento de exigir al gobernador de Veracruz que se ponga a trabajar y deje de estar paseando apoyando a Claudia Sheinbaum, es el momento de que Veracruz deje definitivamente al crimen organizado.
