Francisco Garfias.
Xóchitl Gálvez llegó a pie al Senado, acompañada de un grupo de cuatro o cinco mujeres y sin escoltas. Eran aproximadamente las dos de la tarde.
La virtual candidata presidencial del Frente Amplio Opositor tuvo que caminar, porque la zona estaba bloqueada por manifestantes de la CNTE y policías que impedían el paso hacia Reforma e Insurgentes.
Cuando nos vió, regresó a saludarnos mientras hacíamos fila para entrar al estacionamiento del recinto legislativo. “¿Cómo le hiciste para llegar (en coche)?” Preguntó sorprendida, antes de ingresar al recinto legislativo, en efervecencia por la presencia de Claudia Sheinbaum.
La senadora hidalguense venía de la Cámara de Diputados. Acababa de admitir que la “pendejeó” al hacer referencias bibliográficas, sin citar al autor, en el informe escrito correspondiente a su titulación en la Facultad de Ingeniería de la UNAM.
Dijo textual: “La mayor parte de los temas son técnicos, describen equipo, son sacados de manuales. Un tema es la política pública del gobierno federal en materia ambiental y, pues sí, la pendejeé porque debí haber puesto dónde, de dónde era, la verdad.”
Ya para esos momentos su declaración era un escándalo. Xóchitl les puso el balón y lo patearon. El asunto se hizo viral. A las 9 de la noche llevaba 127 mil posts en X, antes twitter. El 80 por ciento negativos.
Los morenos claudistas que se quedaron calladitos con las acusaciones de plagio a la ministra Yazmín Esquivel, hoy vociferan y hablan de falta de integridad y honestidad académica.
La UNAM ya tomó nota. El rector Enrique Graue le pidió al director de la Facultad de Ingeniería, José Antonio Hernández Espriú, turnar el asunto tanto al Comité de Ética, como al Consejo Técnico de esa entidad, a fin de que se realice el análisis correspondiente.
***
Dentro del recinto parlamentario se encontraba Claudia Sheinbaum, su futura adversaria en la elección presidencial, reunida con la incompleta bancada de Morena, los senadores del Verde y el PT, y con Mario Delgado, presidente del guinda.
Excepcionalmente, la sesión en el pleno se interrumpió para que los senadores de la coalición oficialista pudieran asistir al encuentro con Sheinbaum.
Juntos celebraron la “unidad”, en ausencia de la mayoría sus pares marcelistas, que no fueron al cónclave con la coordinadora de la defensa de la 4T. Sólo pasaron lista dos de los nueve que abiertamente apoyaron al ex canciller: Rafael Espino y Cecilia Sánchez.
Los demás siguen en espera de que la Comisión de Honestidad y Justicia de Morena se pronuncie sobre la impugnación que interpuso Marcelo Ebrard por las “irregularidades” en el proceso interno que culminaron con la entrega del bastón de mando de Morena a la ex jefa de goberno de la CDMX.
El ex canciller quiere lo imposible: que se reponga el proceso. Verbigracia: que se desconozca el triunfo de Sheinbaum.
***
Terminado el cónclave, Claudia ofreció una desabrida conferencia de prensa, limitada a un mensaje y cuatro preguntas que fueron agrupadas para diluir las respuestas.
En su intervención inicial, la coordindora de la Defensa de la 4T dijo:
“Estamos muy unidos todos los dirigentes de este movimiento. Y al decir los dirigentes me refiero a los gobernadores y gobernadoras de nuestro movimiento. Ya somos 23 con la maestra Delfina Gómez que ya está en funciones.
“Pero también a presidentes y presidentas municipales, regidores y regidoras; estamos unidos con los diputados de todas las fracciones; con los senadores, con las senadoras.”
La primera pregunta fue de Andrea Becerril de La Jornada. Quería saber si ya hay un acercamiento con Marcelo, pero también le pidió su opinión sobre el “plagio” de la tesis de Xóchitl.
Respondió: “Hay unidad en Morena, porque nosotros no le cerramos las puertas a nadie. La unidad está dada y nosotros seguimos caminando”.
Aclaró, eso sí, que en los estatutos de Morena están prohibidas las corrientes, en alusión a la asociación civil “Caminos de México”, que el ex canciller acaba de formar con morenistas, verdes y petistas.
Con desdén habló de lo segundo:
“Yo lo pondría de esta manera: al Frente Opositor ni siquiera debemos llamarle Frente Amplio Opositor (Se llama Frente Amplio por México.)
“Son el PRI, el PAN y un pedacito del PRD. No es nada más que el pasado. Es el pasado de privilegios, el pasado de corrupción, el pasado de la mentira, de la simulación, de la desigualdad, de la discriminacion, de la corrupción.”
Pronosticó: “por eso del otro lado van a seguir apareciendo más cosas seguramente, porque ellos representan ese pasado al que el pueblo de México ya no quiere regresar. Nosotros representamos la esperanza…”
El autoengaño pues.
FIN.