Francisco Garfias.
La decisión de no invitar a los representantes de los poderes Legislativo y Judicial a la celebración de las fiestas patrias es un reflejo del desprecio que el presidente López Obrador tiene por la división de poderes.
No es una fiesta privada en casa del presidente a la que puede invitar a quien se le antoje. Monopolizar el grito, el desfile, la gesta de los Niños Héroes, es apropiarse de la celebracion de un acto histórico que nos hizo independientes.
El pretexto que esgrimió es que no hay buenas relaciones con el Poder Judicial. Dice que los ministros, magistrados y jueces se han dedicado a actuar en contra de la Transformación.
López Obrador está confundido. La función de los otros poderes de La Unión no es ponerse al servicio del Ejecutivo. Su tarea primordial es mantener el equilibrio y la armonía en el país, mediante un serie de pesos y contrapesos.
Lo que han hecho los ministros es defender la Constitución. Echar abajo leyes hechas sobre las rodillas que violan los principios de la Carta Magna. Ejemplos sobran: El plan B electoral, la militarización de la Guardia Nacional, la militarizacion del espacio aéreo…
AMLO ve en eso una embestida contra su transformación. Por eso descalifica al Poder Judicial. Dice que “son representantes de la oligarquía, de la minoría corrupta, rapaz, de los delincuentes de cuello blanco”.
Un desaire de ese tamaño no lo habíamos visto ni cuando el bloque opositor tenía la mayoría en el Congreso. De ese tamaño es la polarización.
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¿Y el Poder Legislativo? Marcela Guerra, presidenta de la Mesa Directiva, nos confirmó que ella tampoco ha sido invitada. ¿El motivo es su militancia en el PRI? Es pregunta.
“Yo sí quería ir. Me quede vestida y alborotada”, confesó, después, en entrevista con Azucena Uresti.
Suponemos que tampoco invitó a la morenista Ana Lilia Rivera, presidenta de la mesa directiva en el Senado. Por lo pronto no apareció en la ceremonia de la gesta heroica de los Niños Héroes.
Curioso, son tres mujeres que presiden los Poderes Legislativo y Judicial: Norma Piña, Marcela Guerra y Ana Lilia Rivera. ¿Se sentirá más cómodo en compañía de los jefes militares? Es otra pregunta.
Como bien lo dijo el ex ministro de la SCJN, José Ramón Cossío a Joaquín López Dóriga: el presidente de la República no es el dueño de las fiestas patrias.
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Claudia Sheinbaum ya tiene un coordinador de vocería que dará mucho de qué hablar. La virtual candidata presidencial de la coalición Morena-PT-Verde dio a conocer que esa tarea le corresponde a Gerardo Fernández Noroña.
Lo anunció durante la corta rueda de prensa que siguió al encuentro que sostuvo con los diputados de Morena-PT-Verde en el Auditorio Aurora Jiménez del Palacio Legislativo de San Lázaro.
Noroña coordinará las vocerías de los comités de defensa de la 4T y será el vínculo con organizaciones sociales.
El nombramiento no fue del gusto de los 269 diputados –de los 275 que integran la coalición Juntos Haremos Historia–. “A lo mejor es para que le conteste a Xóchitl Gálvez” nos dijo, mordaz, la diputada morenista Guadalupe Chavira.
No es difícil imaginar un intercambio verbal entre la senadora panista y el diputado petista. Será un concurso de groserías. Ya lo verá.
Un detalle que nos llamó la atención: la mayoría de los diputados marcelistas estuvieron presentes en el cónclave con Claudia. Se contaban con los dedos de una mano los que no pasaron lista. ¿Bandera blanca? ¿Se cuadraron o los cuadraron?
Entre los ausentes fue notoria la ausencia de Emanuel Reyes Carmona, Daniel Gutiérrez y Selene Avila. Buscamos a esta última vía celular. Nos dijo que estaba en su casa incapacitada. Sufrió una caída en el comedor de Morena.
En su mensaje, la Coordinadora de la Defensa de la 4T priorizó la unidad, pidió a los legisladores defender el Presupuesto de AMLO para el 2024 y reiteró que las puertas del movimiento están abiertas.
Entre gritos de “¡Unidad! ¡Unidad!” añadió: “aquí no sobra nadie. Va a haber una convocatoria para que muchas otras personas sean parte de este Movimiento”. Les pidió también “ir a territorio.”
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En San Lázaro charlamos con el diputado morenista Miguel Torruco Garza. Nos habló de sus intenciones de buscar la jefatura da gobierno de la CDMX.
“Hay muchos tiradores, pero yo me considero una herramienta de transformación. No me obsesiona ningún cargo. Tengo 35 años. Estoy preparado y me sigo preparando. Estoy a punto de obtener mi grado académico de doctor en administración pública. Soy un apasionado de la Cuarta Transformación”.
–¿La renuncia de García Harfuch no le dice que la candidatura ya está definida ? —preguntamos.
–Hay varias encuestas donde él encabeza. La idea de nuestro movimiento es mantener la Ciudad de México. Es importantísimo, es el bastión de la izquierda. Estarémos dónde más le se pueda sumar a la 4T—respondió.
Torruco va a dar el grito en Nueva York. Los migrantes lo invitaron el domingo 17 a encabezar una marcha a la que están convocadas más de 30 mil personas que apoyan la 4T.
Depués va a haber un festival y allí dará un mensaje a los que se fueron en busca de una vida digna.
FIN.
