Carlos J. Pérez García.
Y, bueno, se puede ir en un abrir y cerrar de ojos. Mientras, hay que disfrutarla cada día con lo que sea posible: amor, amistad, aspiraciones, detalles, gratos recuerdos, cierto cuidado, optimismo aun en una realidad frustrante… Sin tampoco esperar demasiado.
Me va la vida; me cambió la vida; le debo la vida; eso me da vida; busco una vida digna y saludable… podemos repetir. Claro, la vida entraña la capacidad de nacer, crecer y reproducirse, pero también morir. Es la vida humana que se convierte en un conjunto de experiencias, y nos permite dar vida a otros seres humanos o a cosas materiales e inmateriales.
¿Algunas frases? Diez: La vida es simple, pero insistimos en hacerla complicada (Confucio); No puedes tener una vida positiva si cultivas una mente negativa (J. Meyer); Donde hay amor hay vida (M. Gandhi); Si amas tu vida, ella te corresponderá con amor (A. Rubinstein); La vida es lo que hacemos de ella (F. Pessoa); La vida es para ser disfrutada, no sobrellevada (G.B. Hinckley); La vida es una obra de teatro que no permite ensayos. Por eso canta, ríe, baila, llora y vive intensamente cada momento (C. Chaplin); La vida es una sucesión de lecciones que uno debe vivir para entender (R.W. Emerson); Me preparé para todo, menos para la vida; Hoy es el primer día del resto de mi vida.
En fin, como anotó Frida Kahlo en la pintura de aquella sandía unas semanas antes de su muerte: ¡Viva la vida! Aprendamos y vivamos siempre activos, muy ocupados.
No será poca cosa, oigan. Me parece que vienen tiempos desafiantes pero mejores.
* LOS PRIMEROS AÑOS SEGUÍ con atención la oprobiosa Mañanera y, tal como les conté aquí, dejé de verla hace meses al perder esperanzas de que el actual presidente pudiera mejorar su gestión y su comportamiento. Esta semana volví a asomarme y confirmé que incluso ha empeorado en forma significativa al infamar todos los días a una ciudadana de sobrados méritos que quiere seguir aspirando a algo de mayor trascendencia en nuestro vapuleado país.
Se insiste: Xóchitl Gálvez aterroriza a un ineficaz y corrupto demagogo que, en caso de perder, podría ser procesado. A su vez, en nuestra historia no había habido algo tan inspirador y de tal impacto entre grandes segmentos de la población. En el fondo, quizá sea ella a quien el presidente hubiera querido como su candidata, en coincidencia con tantos mexicanos que reconocen y acogen su historia de esfuerzos exitosos en contra de excesivos prejuicios.
Confirmamos que él y sus feligreses la combaten a la mala y sin respetar leyes ni instituciones, lo cual resulta ominoso para el futuro: son pésimas perspectivas. Aunque trata de ocultarlo, también le angustian el desorden y los pésimos resultados de su sexenio (todavía quisiera escribir el “juicio de la historia”).
Parece no entender los significados de democracia, evaluación, respeto a la ley y las personas, expectación y reacciones a nivel internacional, equilibrio político… Tampoco los de inversión, eficiencia, crecimiento económico, productividad, competencia, mercados, precios, subsidios… Y, ojo, afirmo aquí que son conceptos que tal vez no comprende porque así podría calmarse un poco al tener pretextos para algunos de sus errores, puesto que, de entenderlos, vendría a ser más grave que actuara contra México de una manera tan mal intencionada.
Destacan analistas que la conducta del presidente representa un verdadero peligro para la democracia y el futuro del país. Coincido, además, en que esto se da a partir de su astucia política, aunque con evidentes lìmites en su inteligencia y educación formal. Es una innegable desgracia, por su poder. Pero, fíjense todos: ¡Xóchitl no está sola! Con todo, tiene que cuidarse mucho.
Creo que admitirán ustedes que no ceden las señales de alarma. De hecho, son cada vez más acentuadas. Mujeres y hombres debemos estar presentes, muy atentos.
* DON LUIS MORALES REYES, Arzobispo Emérito de San Luis Potosí y expresidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano (la CEM): Espero que esté bien de salud y que me siga leyendo. Es usted un auténtico gigante de origen humilde, un aspiracionista que se superó con éxito y cumplió en su vida.
@cpgarcieral