Wellington.- Un tiroteo ocurrido este jueves en el centro de la ciudad neozelandesa de Auckland, que se saldó con tres muertos -entre ellos el atacante- y seis heridos, ensombreció el inicio del Mundial de fútbol femenino que ha comenzado este jueves en Nueva Zelanda y Australia.
Ante los temores en torno a la seguridad de este torneo de la FIFA, tanto el primer ministro neozelandés, Chris Hipkins, como la Policía del país oceánico aseguraron que se trataba de un incidente aislado sin motivaciones terroristas, y que además, no supone un problema a la seguridad nacional.
“La gente debe sentirse segura en Auckland y de acudir al evento de la FIFA” declaró Hipkins en rueda de prensa a pocas horas del partido inaugural en esta ciudad entre las anfitrionas y Noruega.
EFE