La Secretaría de la Defensa Nacional informó que este sábado arribaron a la Base Aérea Militar No. 1 ubicada en Santa Lucía, Estado de México, dos aviones de la Fuerza Aérea Mexicana que trasladaron al personal de la Delegación de Ayuda Humanitaria que participó en la sofocación de los incendios forestales en la República de Chile.
Con motivo de lo anterior, la Secretaría de la Defensa Nacional realizó una ceremonia para dar la bienvenida a los 120 elementos del Ejército Mexicano y 180 de la Comisión Nacional Forestal, todos con experiencia y especializados en el combate de incendios forestales, quienes del 5 de febrero al 1° de marzo de 2023, auxiliaron a los ciudadanos del país amigo, como muestra de solidaridad y apoyo internacional.
El evento fue presidido por el General Luis Cresencio Sandoval González, secretario de la Defensa Nacional, quien reconoció la loable labor que la Delegación Mexicana realizó durante su estancia en la República de Chile, entregando una distinción de desempeño por “Ayuda Humanitaria” y reconocimientos a la totalidad del personal que brindó referido apoyo.
Por su parte, el general Brigadier Diplomado de Estado Mayor Juan Bravo Velázquez, Comandante de la Delegación Mexicana, expresó que cada integrante de este equipo puso su máxima capacidad, profesionalismo, experiencia, dedicación y espíritu de cuerpo coadyuvando con el pueblo chileno para evitar que grandes áreas boscosas y población fueran afectadas.
En tanto, Meneses Trujillo, director general de la Comisión Nacional Forestal, hizo mención que el combate de incendios es una actividad de alto riesgo, que implica poner en práctica los conocimientos, experiencias, habilidades y competencias que se han formado durante años, y que el personal de combatientes y soldados participantes cuenta con estas aptitudes y una gran convicción hacia el cuidado de los bosques y del medio ambiente, sin importar la delimitación territorial.
La Delegación de Ayuda Humanitaria, en coordinación con las autoridades chilenas, ayudaron a sofocar el fuego de más de 1,567 hectáreas, habiendo logrado salvaguardar la vida de 272 personas; asimismo, se proporcionaron 266 consultas médicas.
Adicionalmente se realizaron acciones preventivas para evitar la propagación de los incendios, así como afectaciones a la ciudadanía, con el aislamiento de 2,415 viviendas y la creación de 484 kilómetros lineales de guardarraya.