Raúl Flores Martínez.
Vaya sorpresa que no es sorpresa, ya antes habíamos escrito sobre el director general de la Policía bancaria Industrial, Elpidio de la Costa Contreras con indicativo “Álamo”, qué se las gasta de ser el protegido de la Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum Pardo.
A través de las conversaciones y audios que tenemos corroborados con credenciales, sector y los nombres de los oficiales que nos pidieron que se reservaran sus datos e identidad, debido a que el mando policiaco, se cree intocable.
Este es un fragmento de la entrevista que tuve con cinco elementos de la PBI ayer por la tarde, y a quienes les pedía si podía grabar sus dichos, algo que aceptaron bajo la condición de guardar su anonimato.
“Este señor, se siente intocable, el mismo lo dice y siempre lo ha manifestado que él está apadrinado por la Jefa de Gobierno, qué él puede hacer y deshacer lo que él quiera, qué porque él, antes de que alguien lo demande, antes de que alguien haga algo en contra de él, es más fácil que pierda su trabajo o cualquier otra persona que él mismo, porque él va a seguir subiendo como la espuma, porque lo apadrina la Jefa de Gobierno”.
Algo que llama la atención de las diversas conversaciones con elementos de esta corporación, es que el jefe “Álamo”, sube de rango a los policías rasos por unas cuantas monedas, mientras que aquellos que se han ganado el ascenso con base en trabajo, simplemente los bloquea.
En el caso de las femeninas, los favores sexuales son el precio para pagar el ascenso; es decir, el grado que quieran las elementos que se prestan a eso, lo que significa que a más grados alcance, el sueldo es mayor.
“Hay policías rasos que, de un día a otro, ya son oficiales, el sube a quién quiera. A parte con las femeniles si les dan las nalgas, sube de inmediato, de inmediato te sube, no un grado, sino los grados que tu quieras, afectando a todos los compañeros que sin importar de la antigüedad o esfuerzo por ascender, ya se ganaron ese grado que nunca se los darán por los favores sexuales”.
Estos son solo dos fragmentos de una entrevista de una hora con elementos de la PBI que exhiben a su director; algo que debe de llamar la atención, es la supuesta protección que tiene de la Jefa de Gobierno Claudia Sheinbaum, que aseguró no compartirá su visión cuando se le hagan llegar las grabaciones.
Quizá sería bueno que se haga una investigación y auditoría dentro de la Policía Bancaria Industrial para saber si algunos mandos de la nada han subido “como la espuma” y con recursos económicos que no tendrían por el grado y puesto que tienen en la actualidad.
También sería bueno que los elementos que de la nada subieron de grado, a través de un examen y hechos contundentes, demuestren si han sido merecedores de el ascenso, de lo contrario deberían de abrirles un proceso por distintos delitos, incluyendo enriquecimiento ilícito y corrupción.