Raúl Flores Martínez.
Tal parece que la violencia y la política van de la mano en este sexenio, una violencia que se desató hace un par de días, nuevamente en Zacatecas, en ese estado donde gobierna David Monreal, hermano del ya incómodo para el gobierno de López Obrador, Ricardo.
La manera de bajar a Ricardo del carrusel de los presidenciables, es presionar a través de la familia, en este caso a través de la violencia generada por el crimen organizado para dejar mal parada a la familia.
Ya paso al inició del año, el CJNG se encarga de incendiar algunas plazas, dónde casualmente nunca llega puntual un operativo para combatir a las células criminales, hasta después de que han hecho de las suyas; no hay duda que los bloqueos llevan dedicatoria.
Para los aplaudidores de está administración, la cuarta Transformación no tienen culpa alguna de los actos de violencia y todos los hechos que están pasando son culpa de Calderón; sólo que hay un pequeño detalle que su ignorancia, no les alcanza para darse cuenta.
Durante el sexenio de Calderón el CJNG, aún no figuraba en la radiografía del crimen organizado, fue hasta el sexenio de Peña Nieto y sobre todo en la actual administración donde dio un brinco para ser una organización criminal que invadiera todo el país.
Los diversos episodios que causaron terror desde el viernes 26 de agosto en Zacatecas pudieran derivarse de supuestos enfrentamientos entre miembros del Cártel del Pacífico e integrantes del Cártel de Jalisco Nueva Generación, algo que, hasta el momento, no ha sido aceptado por el gobierno federal.
Fresnillo, Villanueva, Valparaíso y otras zonas cercanas a la capital registraron diversos enfrentamientos y narcobloqueos que dejaron un saldo mínimo de ocho autos incendiados.
También el motín e intento de fuga del penal de Cieneguillas, debe de llamar la atención, una estrategia que tiene el crimen organizado para genera caos dentro de un gobierno, se sabe que los penales, son el brazo del crimen organizado y mientras hay un motín se desvían las miradas para otro lugar.
Lo cierto es que está oleada de inseguridad en Zacatecas, tienen una clara dedicatoria contra Ricardo Monreal que está siendo una pieza molesta y perturbadora dentro del carrusel de las corcholatas presidenciables.
Primero fue la sicaria Sansores, cómo no pudo bajarlo del carrusel, ahora utilizan la estrategia del miedo y el terror de la violencia, en el estado que lo vio nacer y en ese gobierno que encabeza su hermano.
