México.-Talina Fernández admite que a sus 78 años de edad, no deja de pensar -todos los días- en que tal vez esa sea la fecha de su muerte.
Aunque la exparticipante de MasterChef Celebrity reconoció que la muerte de su hija Mariana Levy, sí la dejó derrumbada sobre el tema, con el tiempo su perspectiva cambió.
Talina Fernández ahora vive su día a día, aunque sí pensando que su muerte no tarda en llegar, también la disfruta viendo a su hija Mariana reflejada en su nieta, Maria Levy.
La periodista dijo “quizá mi momento se está acercando”, pero apuntó a que esto simplemente se debe a su edad y que cada año es un paso más cerca de la muerte.
Sin embargo, apuntó que no cree que su muerte vaya a ser el fin de su vida, sino que simplemente tendrá una transición, misma a la que dijo no tenerle ningún temor.
Sobre todo porque desde su perspectiva las personas no mueren, sino que se mantienen vivas para siempre, solo que en “diferentes espacios”.
Incluso, hizo una metáfora, en donde aseguró que al llegar a la muerte, ella se ve volando como Peter Pan.
Si algo caracteriza a Talina Fernández es su carisma y la forma en que ve la vida, sin embargo, no siempre pensó lo mismo sobre la muerte.
Recordemos que Talina Fernández vivió una fuerte pérdida, cuando su hija Mariana Levy murió a los 39 años de edad, como consecuencia de un asalto.
Y aunque ahora se muestra positiva ante lo que es vivir y la muerte, no siempre pensó lo mismo.
“Cuando murió mi hija no encontraba la alegría en ningún lado”.
Talina Fernández, periodista.
Sin embargo, explicó que la convivencia que hoy tiene con su nieta María Levy, hija de la difunta Mariana Levy, la ha hecho reencontrarse con su primogénita.
“Ella es de los cuatro amores de mi vida: es una hija más porque después de que se fue Mariana vino a sumarse como una hija a mi vida”.
Talina Fernández, periodista.
Finalmente, Talina Fernández se mostró ‘feliz’ por la llegada de su muerte, pues asumió que esto serviría para reencontrarse con su hija Mariana, además de sus padres y abuela muertos.
Por Brenda Martínez