Raúl Flores Martínez.
Las protestas de los estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa día con día suben de intensidad a casi ocho años de la desaparición de los 43 estudiantes en el municipio de Iguala, Guerrero.
Ayer 39 elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, Ejército y Guardia Nacional, resultaron lesionados tras la lluvia de petardos, cohetones y bombas moltov que traía una fracción de los normalistas que aventaron dentro del campo militar, número uno de la Secretaría de la Defensa Nacional.
Una protesta que al menos en la ciudad de México, se utilizaron diversas armas consideradas blancas y son sancionadas con cárcel; sin embargo, estás protestas en la capital del país son toleradas por el gobierno de cuarta que tenemos.
Primero fue en las instalaciones de la Fiscalía General de la República, donde también hubo heridos a causa de los petardos, un día después fue en el campo militar con una pequeña diferencia.
Ante la inoperancia de la policía capitalina, la Guardia Nacional entró en acción con un par de tanquetas que disolvió el ataque de los normalistas con chorros de agua.
De acuerdo con la Información Filtrada del Gabinete de Seguridad, se logró interceptar algunas conversaciones de algunos grupos de choque de la Normal Raúl Isidro Burgos, qué intentarán reventar la marcha de conmemoración de la desaparición de los 43 estudiantes.
Grupos que estarán armados con bombas molotov, cohetones y petardos, qué serán utilizados contra elementos de las corporaciones policiacas e inmuebles que se crucen en su camino, artefactos que pueden dañar una vida, artefactos que son prohibidos y sancionados de acuerdo a la ley.
La pregunta es directa ¿Cuántos muertos por estos provocadores debe de haber?
Cuántos muertos para que los elementos de seguridad pública hagan su trabajo y los detengan para presentarlos ante el ministerio público por diversos delitos, delitos que son sancionados con cárcel y en otros con multas.
De acuerdo con el artículo 28 fracción VII de la Ley de Justicia Cívica de la CDMX: “Son infracciones contra la seguridad ciudadana (…) detonar o encender cohetes, juegos pirotécnicos, fogatas o elevar aerostatos sin permiso de la autoridad competente”. Y la multa que podría alcanzar la persona que incurra en esta práctica es de 21 a 30 Unidades de Medida (hasta 2,688 pesos), arresto de 25 a 36 horas o trabajo comunitario de 12 a 18 horas.
En el caso de las bombas molotov de acuerdo con el Código de procedimientos Penales, el Artículo 160 señala que “A quien porte, fabrique, importe, venda o acopie sin un fin lícito o con la intención de agredir, instrumentos que puedan ser utilizados para el ataque o la defensa, se le impondrá prisión de uno a seis años y de quinientas a mil veces el valor diario de la Unidad de Medida y Actualización, así como el decomiso”.
Con estos artículos queda claro que los estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa, han violado de manera reiterada la ley en la ciudad de México con el consentimiento de la autoridades de la capital del país.
