México.- Derivado de la manifestación frente a las oficinas de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar), en la Ciudad de México, personas servidoras públicas de este órgano desconcentrado de Gobernación, y de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) como observadores, además de personal de seguridad institucional de dicha secretaría, entablaron comunicación con quienes se encontraban impidiendo el acceso a las instalaciones.
Éstas se habían tenido que cerrar a partir de las 14:20 horas para atención al público, en virtud de que no existían condiciones de seguridad ni físicas ni sanitarias.
La comunicación se hizo también en el idioma materno de la población que se encontraba en el exterior de las oficinas.
El personal de la Comar reiteró que se encuentra abierto al diálogo en consistencia con su práctica habitual, siempre que sea en forma ordenada, segura y respetuosa.
Se enfatizó que en concordancia con las recomendaciones que han realizado las autoridades sanitarias frente al actual repunte de casos por COVID-19, es de suma importancia evitar aglomeraciones y mantener sana distancia.
La Comar respeta el ejercicio de los derechos de las personas, y reitera la necesidad de no afectar los derechos de terceros, garantizar el libre tránsito e ingreso al edificio, haciendo énfasis en que las atribuciones de la comisión se limitan a llevar a cabo el procedimiento de la determinación de la condición de refugiado y evaluar las necesidades de los solicitantes, especialmente las de personas en condiciones de vulnerabilidad para referirlas a las instancias correspondientes, por lo que mantendrá congruencia con ello, en estricto apego a la normatividad.
Con información de la SEGOB