México.- En el marco de los compromisos asumidos en el Foro Mundial de Refugiados de 2019, la Secretaría de Relaciones Exteriores, a través de la Subsecretaría para Asuntos Multilaterales y Derechos Humanos; la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar); la Agencia de la ONU para los Refugiados (Acnur) y la asociación civil Diálogo Intercultural de México Activo (DIMA) firmaron un Convenio de Colaboración y de Concertación de Acciones que tiene como objetivo trasladar a 100 personas refugiadas y solicitantes de la condición de refugiado a México para facilitar oportunidades de educación superior, mediante el programa de becas universitarias creado por Proyecto Habesha, uno de los principales proyectos de DIMA.
La firma de este Convenio permitirá a personas refugiadas reconocidas en un tercer país y a solicitantes de la condición de refugiado viajar a México para estudiar bajo el Proyecto Habesha, mismo que nació en 2015 para hacer posible que jóvenes originarios de Siria continuaran su educación superior en México. La colaboración entre la SRE, la Comar, el Acnur y DIMA contribuye al objetivo global del Acnur de aumentar el acceso a la educación superior para los jóvenes refugiados en 15% para 2030.
La participación de las personas refugiadas en la educación superior fortalece los sistemas educativos nacionales en beneficio tanto de las comunidades de acogida como de los refugiados. Actualmente, 5% de las personas refugiadas en el mundo tiene acceso a la educación superior, en comparación con el 1% en 2019. Cabe destacar que el promedio mundial de matriculación en educación superior de personas que no son refugiadas es de 39%.
Las personas refugiadas y solicitantes de la condición enfrentan múltiples obstáculos legales, administrativos y prácticos para acceder a vías complementarias; entre ellos, criterios de admisibilidad, requisitos financieros y de documentación, así como dificultades para acceder a embajadas, obtener permisos de salida o encontrar información. Otro desafío a nivel global es la falta de coordinación entre las partes interesadas, o bien que la vía no ofrece salvaguardas suficientes para satisfacer las necesidades específicas de protección de las personas refugiadas.
El diseño del programa con Proyecto Habesha, Comar, SRE y Acnur busca superar estos obstáculos además de ser el primer programa de vías complementarias para el acceso a educación terciaria en América Latina.
Esta acción está alineada con la Estrategia Trienal del Acnur (2019-2021) sobre Reasentamiento y Vías Complementarias, que tiene como objetivo ampliar las soluciones en terceros países para que, a finales de 2028, 3 millones de personas refugiadas se beneficien de la protección y las soluciones eficaces (1 millón en 50 países de reasentamiento y 2 millones por las vías complementarias).
El Foro Mundial de Refugiados se convocó en 2019 en solidaridad con las personas refugiadas y los países y comunidades de acogida, y resultó en más de 200 compromisos específicos para la educación. Uno de ellos fue crear una vía complementaria a México para otorgar a personas refugiadas y solicitantes de la condición de refugiado una estadía legal en un tercer país que satisficiera sus necesidades de protección internacional a través de oportunidades educativas.
Con información de la SRE