Raúl Flores Martínez.
Vaya pleito que se avecina en la alcaldía de Xochimilco con una nueva puesta en escena de la legendaria obra de Teatro de la Llorona en Cuemanco; resulta que ahora un productor de una televisora, tuvo la brillante idea de hacer una obra musical de esta leyenda.
De acuerdo con los productores de la prestigiosa obra de teatro “La Llorona de Cuemanco”, el productor Rafael Perrín comenzó a repartir dinero entre los dueños de las trajineras de los canales de Cuemanco, para permitir esta obra de teatro.
Sin embargo, el grupo de teatro de la obra que año con año, ha llevado a más de 50 mil personas a la isla natural, no están de acuerdo porque a pesar de que tienen un guión distinto la idea fue robada.
El pleito que se viene encima, va más allá de la obra de teatro, es con los dueños de las trajineras, quienes quieren adueñarse de los canales, ahora que han sido limpiados para llevarse más dinero en la bolsa.
De acuerdo con la Información Filtrada, el productor de esta nueva obra y los dueños de las trajineras, que no son dueños de las chinampas, han tejido una serie de condiciones para presionar a los dueños de las chinampas para que cedan con los permisos para que este musical se lleve a cabo.
Entre las presiones que sufren los chinamperos, es la obstrucción a sus parcelas acuáticas para evitar que vendan sus legumbres que cosechan a diario en esta parte de la alcaldía.
También han exigido un millón de pesos a comerciantes y productores de las otras obras que se llevan a cabo en la zona, para permitirles laborar en días de muertos, de lo contrario, no se les permitirá acercarse. Esto en México, se llama extorsión y es un delito que las autoridades de la Fiscalía capitalina, deberían de investigar.
Por si fuera poco, los funcionarios de la alcaldía de Xochimilco, Secretaría de Cultura y Gobierno de la Ciudad de México, no han dado su apoyo a los legítimos dueños de las chinampas y productores de la obra “La Llorona de Cuemanco”, quienes dan empleo a los lugareños, algo que no harán en este musical.
Debemos hacer memoria, en los canales de Xochimilco en el recién parque ecológico, se puso en escena la obra prehispánica que fue un fracaso en toda la extensión de la palabra. Ahora un productor fusilándose la idea de una obra que lleva más de 15 años en escena, trata de reactivar un turismo que, sin necesidad de esto, se da todos los fines de semana.
Las autoridades de la alcaldía deben de revisar los permisos de este productor, porque piensa construir en un islote una pirámide de 8 metros de altura y tener el permiso por cinco años, supuestamente para incentivar el turismo nacional e internacional el día de muertos, algo que se da desde hace 15 años.
Solo queda esperar a las autoridades que tanto han defendido a los xochimilcas, a todos aquellos actores que de manera autodidacta, iniciaron una obra que lleva todos los elementos originarios del lugar, incluyendo el dialectos con el que se canta que es el náhuatl, sobre todo que ha dado empleo a los lugareños.
