Carlos Arturo Baños Lemoine.
Hoy, México se cubre de vergüenza, porque la estupidez campea por todo el territorio nacional a fin de darle gusto al Nerón de Palacio Nacional, Andrés Manuel López Obrador.
Hoy es día de uno de los caprichos presidenciales más inútil, idiota e innecesario de nuestra historia reciente, ¡y miren que en este país vaya que a los presidentes les ha dado por ser caprichositos!
Doble vergüenza porque se trata del primer ejercicio de consulta popular a escala nacional de nuestra historia reciente. ¡Y miren que debe darnos coraje organizar una consulta popular de tal envergadura para hacer una pregunta tan pendeja!
Triple vergüenza porque la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) avaló tal despropósito y, además, lo aderezó con una pregunta tan estúpida como la pregunta originalmente planteada: la corrección de la pregunta, pues, resultó peor. La SCJN se quiso lucir y salió deslucida. En fin, que la SCJN se doblegó ante el capricho del dictador populista que vive en el Palacio Nacional. La SCJN ha manchado con creces su toga, de por sí negra.
¡Y todo este circo totalmente innecesario, además de costoso!
Innecesario porque no se requiere de consulta popular alguna para aplicar las leyes penales a fin de investigar y sancionar los delitos cometidos por parte de cualquiera persona; ya que, como bien dice el apotegma jurídico: “Ley vigente, mandato permanente”.
Si una persona incurre en una conducta delictiva, ésta debe hacerse del conocimiento del Ministerio Público a objeto de que se integre la carpeta de investigación correspondiente (antes averiguación previa) y, de ser procedente, se ejerza acción penal contra el imputado en espera de sentencia firme. ¡Así de sencillo!
Si se trata de ex presidentes, nada cambia, porque ya no cuentan con fuero: son ciudadanos comunes y corrientes. Y si se trata de posibles faltas administrativas o civiles, ya existen los canales legales e institucionales para proceder contra quien sea.
No se necesita, pues, de consulta popular alguna porque, insistamos en ello, “Ley vigente, mandato permanente”.
Pero sucede que tenemos a un furioso megalómano en la Presidencia de la República, que cuenta con el apoyo de muchos ignorantes limosneados que resultan ser sumamente manipulables. A éstos, López Obrador les ha hecho creer que el curso de la “justicia nacional” depende de la estúpida consulta de hoy, mientras el mismísimo López Obrador se presenta como el “Gran Justiciero de la Patria”.
López Obrador da limosnas mientras estimula el resentimiento, fórmula típica del manual del populismo latinoamericano. El Caudillo se vale de la ignorancia de la gente para encajarle ideas y consignas de “venganza social”. Y el efecto idiotizante es tan eficaz que las masas estultas no logran verse como los títeres que son y tampoco logran ver los evidentes fracasos de su “líder”.
Por supuesto, López Obrador y sus monigotes ya tienen preparado el plan de ataque ante el previsible fracaso de la consulta de hoy: culpará al INE, a la “prensa vendida y zopilotera”, al “neoliberalismo”, a los ex presidentes mismos, al “anti-humanismo” y al Diablo en calzones. Jamás reconocerá su demencia, porque su mismo delirio de grandeza no se lo permite.
En fin, mis amigos, que a los gobiernos ineficaces y corruptos del pasado ahora debemos sumarles un gobierno ineficaz, corrupto y estúpido en grado extremo. Vamos, pues, en retroceso.
https://www.youtube.com/watch?v=-Ulccsiuf3Y
Facebook: Carlos Arturo Baños Lemoine
Twitter: @BanosLemoine
YouTube: Carlos Arturo Baños Lemoine
Instagram: banos.lemoine
https://banoslemoine.wordpress.com/
Esta videocolumna de análisis, crítica y opinión es de autoría exclusiva de Carlos Arturo Baños Lemoine. Se escribe y publica al amparo de los artículos 6º y 7º de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. Cualquier inconformidad canalícese a través de las autoridades jurisdiccionales correspondientes.